Maglione sale reelegido y Europa pierde poder en la FINA
El supuestamente corrupto Al Musallam continúa como vicepresidente. La natación sincronizada pasará a denominarse natación artística.
Tal y como avisaba el presidente de la Federación Española de Natación, Fernando Carpena, el italiano Paolo Barelli ha perdido las elecciones a la presidencia de la Federación Internacional de Natación (FINA) en manos de Julio Maglione, quien a sus 81 años y después de dos mandatos, seguirá al frente de este organismo (258 a 77 votos). El uruguayo ha ganado gracias al apoyo de continentes como Asia y África, y de la super potencia Estados Unidos, mientras que el candidato apoyado por la mayoría de países europeas no ha sumado los votos suficientes. Europa pierde poder.
Tampoco valió el último revuelo para que el vicepresidente kuwaití, Husain Al Mussallam, quedase excluido del Bureau de la FINA hasta 2020, debido a su supuesto caso de corrupción en el que exigía vía teléfono (hay grabaciones que lo atestiguan) el pago de un 10 por ciento de comisiones de una operación de patrocinio en una conversación con un representante chino. Al Mussallam seguirá en su cargo. Del listado de 25 miembros de la FINA se cae Fernando Carpena y solamente habrá siete representantes europeos.
Otra de las decisiones del Congreso ha sido la de cambiar la nomenclatura de la natación sincronizada, que a partir de ahora se llamará natación artística. Un punto del orden del día que finalmente no se ha aplazado. Al margen de otros cambios estructurales, la FINA también prohíbe la publicidad de apuestas deportivas.