A EEUU le basta un cuarto para superar a España (12-8)

Estados Unidos sigue al menos un peldaño por encima de España, que fue de menos a más en un partido desequilibrado, en el que a las de Miki Oca les penalizaron los flojos primeros minutos, en los que se llegó con un contundente 6-1. Reaccionó la Selección, que al menos logró evitar malos mayores y convertir varias acciones de superioridad, una buena noticia teniendo en cuenta el rival que estaba enfrente y lo que queda de torneo (12-8). El jueves ante Sudáfrica, las guerreras deben confirmar la segunda plaza de grupo. Mejoran también las de Oca con respecto a los Juegos de Río, ya que perdieron 4-11 en la fase inicial. De hecho, ganaron los tres últimos parciales (6-7).

El primer cuarto fue para olvidar. Pese a que Bea Ortiz puso por delante a la Selección femenina en el primer ataque, con un soberbio lanzamiento desde la posición de cuatro, la apisonadora americana no tardó en ponerse en marcha. La superioridad en la boya de las campeonas olímpicas desequilibró la defensa española, a la que le faltó más atención y nervio del habitual, doblegadas por un potente rival. Musselman, desde fuera, le dio la vuelta al marcador (2-1), Neushul, la jugadora del CN Sabadell, anotó el 3-1 y acto seguido Fattal, desde la posición de boya, convirtió el 4-1. Le pesadilla se completó con un el palmeo de Fischer (5-1) y el tanto de Neushul en el último segundo (6-1).

Las correcciones de Oca ayudaron a equilibrar el partido. Lloret siguió goleando como ante Nueva Zelanda con una espléndida vaselina, contrarrestó de penalti pero Anni Espar puso el 7-3 en una superioridad. Le fue imposible a España anotar en igualdad. Pese a ello, España la mantuvo el pulso al partido y supo ir reduciendo la distancia. El tercer parcial fue parejo (2-2). Steffens y Williams recuperaron la diferencia de seis goles a favor de las de Krikorian, pero un gol de Anni Espar y otro de Forca oxigenaron a España (9-5).

El último cuarto fue una oda al ataque, con un bonito intercambio de golpes, con el choque ya decidido. Lejos quedaron aquellos duelos jugados más al límite. Neushul siguió con su puntería, como Musselman y Fattal, que martillearon a Laura Ester. De nuevo Forca y Espar redujeron distancias (12-8). Un dulce final para un amargo inicio.

Entre la decepción y la resignación se marchó la Selección femenina de waterpolo después de perder ante Estados Unidos por 12-8 en el segundo partido de la fase de grupos del Mundial de Budapest. Un resultado más próximo que el vivido en los Juegos de Río, aunque ese parcial de 6-1 en los primeros ocho minutos pesó. Y mucho. “No me quedé asustado, pero fue frustrante. Nos costó mucho, tuvimos que ir a remolque desde el inicio y nunca nos reenganchamos”, comentó Miki Oca.

El técnico reconoce que su equipo, por circunstancias, no salió de la mejor manera. “Las chicas están atentas y tensas. Pero juegas ante Estados Unidos, que es la favorita, y no te pillan bien situado. Tenemos chicas jóvenes, pero también ellas”, dijo el entrenador, que además añade el particular juego de uno contra uno americano. “Su defensa es agresiva para asegurar que no haya gol de jugada. Tenemos que aprovechar las superioridades. Ellas quieren jugar duras, con presión al cuello”, finalizó.

Esta derrota llega en la fase en la que hay margen de error. El seleccionador cree que la clave está en aprender de los fallos cometidos. “El equipo está bien. Tenemos suerte de que esto es un segundo partido del Mundial. Tenemos que seguir aprendiendo y mejorando. En los primeros partidos tiene la opción de cometer errores. Hemos hecho tres partes buenas, y hay que quedarse con eso. Hay que entrar mejor en los partidos. Hicimos tres partes en las que jugamos de tú a tú”, reflexionó Oca, mientras reconoce que ya mira a la siguiente ronda a la espera de medirse a Sudáfrica el jueves. “El verdadero Mundial empieza los días de cruce. Si somos segundos de grupo nos las veremos seguramente con China o Canadá”, valoró.