Las cinco claves de la derrota de Pacquiao ante Horn
La sorprendente derrota de Manny Pacquiao ante Jeff Horn ha provocado una gran convulsión en el boxeo. En AS analizamos los cinco momento claves del pleitoJoshua - Parker en vivo: Pesos pesados en directo
La controversia tomo Brisbane (Australia) cuando los jueces decretaron que Jeff Horn había ganado a los puntos a Manny Pacquiao. El filipino perdía el cinturón mundial del peso wélter por la Organización Mundial de Boxeo (WBO, en inglés), pero las puntuaciones no convencieron al respetable. Pacquiao fue superior para la gran mayoría, menos para los jueces. Repasamos los cinco momentos que pudieron cambiar el devenir del combate.
1. Elección del rival
Sobre el papel la elección de Jeff Horn por parte de Manny Pacquiao era algo trivial. Se esperaba que el australiano ofreciese un buen papel, pero la derrota ante la leyenda parecía segura. Todo ha cambiado con su victoria. Horn ha tomado otra dimensión y su elección ha cobrado importancia. Bob Arum se empeñó desde un principio en que ambos se enfrentasen, Pacquiao prefería a Amir Khan, pero finalmente esa opción no salió y aceptó el pleito con ‘la avispa’ Horn. Todo seguía el camino correcto, fallaron las puntuaciones y ahora los planes de PacMan se han quebrado. La revancha es el próximo objetivo del filipino.
2. Dominio de Pacquiao
Horn salió a incomodar a Pacquiao, lo logró, pero el filipino tiró de veteranía y comenzó a sacar sus mejores movimientos sobre el ring. La pelea era del filipino. Se movía, percutía y se volvía a mover. PacMan se dedicaba a restar aire y fuerza a Horn. El australiano buscaba los agarrones, para cortar el boxeo fluido de Pacquiao. Dos estilos, pero sólo triunfó el de la leyenda. Desesperado por ello, Horn comenzó a rozar la legalidad, algo que fue clave en el sexto y séptimo asalto y marcó el combate.
3. Intervención del árbitro
Del sexto al octavo asalto se produjeron tres hechos que cambiaron totalmente el devenir del combate y de las puntuaciones. En el sexto Horn propinó un cabezazo a Pacquiao, realizándole un corte. En el séptimo el australiano le produjo otro corte, ésta vez con un codazo. El árbitro lo entendió como acciones fortuitas, pero la duda de la legalidad estaba presente. Si hubiese restado dos puntos a Horn todo había cambiado. Esas acciones podían sido cruciales, aunque sin dudas la palma se la llevó una caída del púgil local en el octavo asalto. Pacquiao le dañó con una buena mano, Horn se fue al suelo. La cuenta era clara… pero el árbitro entendió tropezón y no realizó la cuenta de protección. Tres acciones, tres puntos menos para Horn y la decisión de los jueces hubiese sido completamente diferente.
4. Falta de pegada de Pacquiao
Con Horn muy tocado, Pacquiao se fue con todo a buscar el KO. Llevaba siete años sin vencer por KO y lo tenía muy cerca. Hay que recordar que el filipino ha sido campeón en ocho categorías diferentes, pelea en un peso muy superior al que comenzó. Eso y la edad le han ido restando pólvora. Además, con el paso del tiempo Pacquiao es capaz de sacar menos trabajo. En sus mejores combates promediaba 1.000 golpes lanzados por pelito, ante Horn se quedó en 573. Eso sí, llegó mucho más que Horn, pero no hacía daño.
5. Último asalto
La polémica en las decisión de los jueces fue alta y hubo dos hechos que lo dejaron más de relieve. El primero fue el abucheo generalizado del público, que lo manifestó a pesar de que ganó el púgil local. El segundo fue la actitud de ambos en el último round. Ambos estaban muy cansados y dieron lo que tenían. Pacquiao rehuyó la lucha, esperando un golpe de gracia. Tenía claro que la victoria era suya. Por su parte Horn sacó mucho trabajo, creía que perdía y lo dio todo. La actitud de Pacquiao y Horn fue clave, si los jueces se lo hubiesen dado el asalto a Pacquiao el combate hubiese sido nulo. Cambiando por completo todo lo que se ha desencadenado desde la derrota.