Ignacio Aguado: “Debe ir dinero de las apuestas al deporte”

Ignacio Aguado tiene la espalda ancha. Los hombros prominentes. Es su herencia de jugador de waterpolo en el Real Canoe, el club de referencia de Madrid (“el de toda la vida”), donde comenzó a competir porque era la instalación emblema de su barrio, el de La Estrella, y porque en su colegio de los Agustinianos una de las horas de Educación Física se dedicaba a la natación.

Una espalda ancha que le viene bien en política, donde los codazos y el juego subterráneo no envidian, a veces, al que debe hacer frente un boya en el agua. Ahora, con 34 años, es portavoz de Ciudadanos en la Asamblea de la Comunidad de Madrid y su jefe, Albert Rivera, ha puesto en sus manos la secretaría nacional de Deporte del partido. De jugador de waterpolo a jugador de waterpolo. Ayer visitó AS para explicar las líneas maestras de su programa, junto a Roberto Núñez (exjugador del Real Madrid de baloncesto en ACB, de 39 años y diputado autonómico en Madrid) y Jennifer Santos, su responsable de comunicación.

“En Ciudadanos, damos mucha importancia al deporte. Más allá de las fotos en las despedidas y de ponerse la camiseta cuando se celebra un éxito, queremos que sea un eje de nuestro ideario. Tenemos claro el concepto de situarlo en el centro de las políticas de sanidad y económica. Lo que no tenemos tan claro es si debería tener un ministerio propio”, advierte.

Aguado jugó en el Canoe “hasta los 18 o 19 años” y compartió vestuario con Iván y Dani Moro o Gabi Hernández. “Yo era el último mono”, bromea. “Ganamos dos ligas (las de 1998-1999 y 1999-2000), las únicas que no se han ido a un equipo catalán”, apunta. Luego, comenzó las carreras de Derecho y Administración de Empresas y tuvo que dejar la piscina. “Era imposible compaginarlo”, se lamenta. Una alergia por saturación de cloro también contribuyó a alejarle del agua. Después pasó siete años trabajando en Unión Fenosa. Y ahora lleva dos en la arena política: “Jugué también en Primera con La Latina y ahora me escapo de vez en cuando a nadar, pero no me queda mucho tiempo”. En el agua, abstraído, y centrado en la línea de la calle, también uno encuentra concentración. Y llegan las ideas.

¿Qué propone Ciudadanos para el Deporte? “Pretendemos un enfoque vinculado a la salud. Conseguir una sociedad saludable evita muchos gastos sanitarios”, dice Aguado. Para ello, una de sus prioridades sería “aumentar de dos a tres horas semanales las clases de Educación Física en los colegios”. También “que las instalaciones de los centros educativos se puedan utilizar fuera del horario lectivo y estén al servicio del barrio”.

“Esa es una propuesta que hemos conseguido que se apruebe en Madrid”, apunta Roberto Núñez. Una comunidad donde Ciudadanos tiene un pacto de investidura con el PP que hizo presidenta a Cristina Cifuentes. PSOE y Podemos apoyaron ese plan de utilización de instalaciones escolares.

Núñez, que jugó de base también en el Canoe, Lucentum, León, Lagun Aro, Guadalajara, Zaragoza o Italia, fue el más joven en debutar en el Real Madrid (16 años y cinco meses) hasta que Luka Doncic le quitó el récord por dos meses. “A mí me sacó Zeljko (Obradovic) ante 12.000 personas y el primer balón que cogí me lo boté en el pie y lo envié fuera. Doncic enchufó un triple. ¡Una diferencia sutil!”, se ríe recordando su etapa en las canchas.

Quizá por su experiencia en el baloncesto, a Núñez le gusta el modelo deportivo de Estados Unidos, con universidades fuertes: “Sería el ideal, porque permite compaginar estudios y deporte”. Aguado asiente.

Para la voz de Ciudadanos en materia deportiva, se hace necesario “actualizar una Ley del Deporte que es de 1990 y que está obsoleta en aspectos como los del deporte femenino”. Para ello, se ha visto “varias veces” con Alejandro Blanco, presidente del Comité Olímpico Español. Con José Ramón Lete, secretario de Estado para el Deporte, sólo ha coincidido “en el palco del Bernabéu”. “Representamos a todo el mundo, y si nos invitan, tenemos que ir”, apunta sobre su presencia. Él que, además, tiene otros colores, los rojiblancos. “Me hice socio del Atleti cuando el doblete, pensando que todo sería así”, sonríe.

Desde la secretaría de Deporte del partido naranja, también se están dando reuniones con directores de comunidades autónomas y para final de año quieren tener listo un documento, el Plan Nacional, elaborado junto a expertos y deportistas con la intención de lanzarlo en un acto público.

Ignacio Aguado explica que Ciudadanos tiene intención también, si logra gobernar, de darle una vuelta al sistema de financiación del deporte. “Un porcentaje de lo recaudado en impuestos por las apuestas debería ir al deporte base. Sería sencillo, sólo hay que modificar un reglamento de la Ley del Juego. Si el año pasado se recaudaron 5.000 millones de euros por ese concepto, resultaría que irían 50 a la base. Teniendo en cuenta que el Consejo Superior de Deportes va a destinar 51 millones en 2017 a subvenciones a federaciones, sería doblar la aportación estatal”, calcula.

También apunta hacia acciones de “micromecenazgo”. “El Taller Pepe que patrocina al equipo de barrio o el club de chavales debería recibir incentivos fiscales por aportaciones hasta 50.000 euros”, refiere. En ese sentido, el CSD ya puso en marcha el programa ‘España Compite’ por el que las pequeñas empresas pueden deducirse hasta un 40% de la cantidad aportada en la cuota del impuesto de sociedades.

También recuerda Aguado que el modelo español está muy centrado en las federaciones, y no todo está ahí. “El 80% de la gente que practica deporte no está federado y toda la legislación gira, sin embargo, en torno a las federaciones”.

“El deporte es un eje central para nosotros porque visibiliza la ‘Marca España’, supone dos puntos del Producto Interior Bruto y hay 200.000 puestos de trabajo y 30.000 empresas vinculadas a él”, enumera para ofrecer una perspectiva de un sector al que quizá no se le da excesiva relevancia como motor económico.

Entre esos profesionales que viven de la actividad deportiva también creen necesario una “ordenación de las profesiones para controlar que las personas que se dedican a ello tengan una cualificación y ofrezcan unas garantías”. Algo que ya han acometido en Madrid.

Madrid, esa ciudad que últimamente ha aspirado tres veces a los Juegos (2012, 2016 y 2020) y que por tres veces se ha llevado un portazo del COI. ¿Hay que retomar la carrera? “Lo veo imposible a día de hoy. La política no es ilusión, aunque sea lícito que otros colectivos y ciudadanos tengan esa aspiración olímpica. Con los recortes que se han hecho en sectores claves, no veo que económicamente sea bueno meterse en eso”, zanjó sincero.

De esas candidaturas queda el triste esqueleto del que iba ser Centro Acuático al lado del Wanda Metropolitano. No se sabe qué pasará con él. “Me gustaría que siguiera siendo una piscina. En Madrid, los clubes están necesitados de ‘agua’. Quitando las piscinas del Mundial 86, no hay una gran instalación”, propone.

Son las líneas maestras para el deporte de una formación nueva. Ciudadanos nació en Barcelona en 2006 como una reacción hacia el nacionalismo. “Yo me afilié en 2013, éramos treinta en Madrid. Supongo que lo decidí un día que me enfadé más de lo normal escuchando a Rajoy”, dice. Ahora, hay 23.000 afiliados en toda España y tienen representación en todos los parlamentos autonómicos excepto en cinco.