Pat Mahomes, un brazo por el que perder la cabeza
El quarterback de Texas Tech, una universidad que siempre infla los números de sus estrellas, es una promesa del todo impredecible.
Los Kansas City Chiefs, tras un trade con los Búffalo Bills, seleccionaron con el pick 10 a Pat Mahomes, quarterback de la Texas Tech. Los Chiefs empiezan a buscar el recambio de Alex Smith y no han dudado en buscar al QB con más talento y potencia de brazo de esta camada, eso sí aún por pulir.
¿Cuales son las probabilidades de que Pat Mahomes acabe siendo el quarterback para una década de una franquicia de la NFL? Francamente, ni idea. Es probable que, en número de probabilidades, se parezcan mucho a las de que esté fuera de la liga en menos de un lustro. Tan extremo es lo que muestra en su juego.
Porque ha pertenecido a la universidad de Texas Tech, con un sistema ofensivo que tiende a inflar los números de todas sus estrellas ofensivas. Y sus números son espectaculares. Lo que pasa es que no es un producto refinado, ni mucho menos, y ese mismo sistema no es trasladable a la NFL.
Lo que sucede es que Mahomes tiene algo que le diferencia: un brazo que es una barbaridad. Un brazo y una actitud. Oh, sí, también un desparpajo y que no le tiene miedo ni a la muerte. Es el clásico tipo que ves en un pocket y te cae la baba. ¿A cuantos entrenadores y general managers no se les pasará por la cabeza pensar que tienen madera ahí para todo? Estoy seguro que a varios.