Venezuela se despide del clásico con una nueva decepción

Con una dolorosa derrota ante el combinado de Puerto Rico 13-2, se colocó punto final a la participación en la cual se sufrieron cinco derrotas, sólo pudiendo vencer en dos ocasiones al aguerrido conjunto de Italia.

¿Cómo entender el estrepitoso fracaso de un combinado repleto de jugadores de las Grandes Ligas?, Con siete títulos de bateo seguidos en la gran carpa (cuatro de Miguel Cabrera, dos para José Altuve y uno de Carlos González) junto a un Cy Young del diestro Félix Hernández, que proviene de un país con 358 jugadores que con participación en MLB, segundo número más elevado entre los jugadores extranjeros detrás de República Dominicana parece inexplicable.

Los motivos de la debacle

Las razones del terrible desempeño de los venezolanos, debemos ubicarlas desde antes que el Clásico iniciara.

En efecto, desde el momento que se fue conformando el roster, varias fueron las notables ausencias que sufrió la divisa suramericana sobretodo en el cuerpo de lanzadores, los casos de Carlos Carrasco, Junior Guerra, Aníbal Sánchez o Eduardo Rodríguez entre los abridores que en la temporada de 2016 alcanzaron 30 triunfos y el relevista Jeanmar Gómez quien labró 37 salvados con los Phillies en la pasada campaña.

Sin duda les hubiesen dado una mayor fortaleza al talón de Aquiles de los venezolanos que permitió 55 carreras durante el campeonato.

Ya durante el clásico, haber perdido el primero encuentro por la vía del KO ante la selección de Puerto Rico, desnudó las carencias del equipo venezolano, que para mayores males no pido anotar ninguna carrera, echando de menos la mayor virtud de la cual presumía la divisa: la ofensiva.

Si bien en el segundo encuentro se pudo ganar de manera muy sufrida ante Italia en extra innings, se tuvo que venir de atrás al adelantarse la escuadra trasalpina 5 a 0 a la altura del cuarto inning, Además que se pagó un precio muy elevado al salir el receptor venezolano Salvador Pérez, lesionado en el 9º inning al colisionar con Drew Butera, quien venia rumbo al home para dejar en el terreno a la divisa tricolor.

No fue la única lesión venezolana en el encuentro, también el relevista Silvino Bracho, salió lesionado del tendón de la corva y el cerrador Francisco Rodríguez salió por un calambre en la ingle.

El encuentro contra México, también empezó como los dos encuentros anteriores, recibiendo carreras del contrario antes que la ofensiva venezolana pudiera carburar. Los aztecas llegaron a tomar una ventaja de 8-1 en la parte alta del 5º inning, ventaja que se fue achicando en el desarrollo del juego, pero que no fue suficiente para voltear la pizarra siendo la segunda derrota venezolana 11-9, sin embargo, por el polémico criterio de desempate, los venezolanos, por una centésima ganaron el derecho de enfrentar a Italia en un juego extra.

En el juego de desempate, contando sólo con 5 lanzadores la divisa suramericana, logró alzarse con el triunfo 4-3 sellando su pase a la segunda ronda, ante Puerto Rico, USA y República Dominicana.

La fase de grupos en San Diego

El inicio de la segunda ronda, enfrentó a los venezolanos y norteamericanos; hasta el séptimo episodio, Venezuela estaba dando la campanada blanqueando 2-0 al conjunto de las barras y las estrellas con excelente labor de Félix Hernández y los relevistas que suscribían la gesta. Lamentablemente en la parte de abajo del octavo inning, ante Héctor Rondón, set up de los Cachorros de Chicago, quien irónicamente había sido incorporado en la segunda fase del campeonato para fortalecer el bullpen, fue castigado con cuadrangulares de Adam Jones y Eric Hosmer, para voltear la pizarra con el definitivo 4x2. Para colmo de males también perdieron a Martin Prado por tirón muscular, El toletero de los Marlins en este Clásico dejó buenos números a la ofensiva con average de .438, siete imparables en 16 turnos al bate, tres dobles, cinco carreras impulsadas y dos anotadas, además de convertirse en el primer jugador con 5 incogibles en un encuentro en la historia del Clásico.

La ofensiva que había sido la tabla de salvación de los venezolanos en la primera fase del clásico, anotando 24 carreras en el estadio panamericano de los Charros de Jalisco, desapareció en la segunda fase en el Petco Park de San Diego donde sólo se pudieron anotar cuatro carreras en tres encuentros.

A pesar de esta sequía, tanto ante los americanos como ante los dominicanos, los juegos se mantuvieron cerrados, pero con sendas derrotas de los suramericanos 4-2 y 3-0, en el juego ante los quisqueyanos para variar un nuevo lesionado: Miguel Cabrera, quien salió del desafío por dolores en la espalda

Con la derrota venezolana y el posterior triunfo de los boricuas ante los americanos 6-5, se selló la eliminación matemática del equipo llanero.

El juego ante Puerto Rico, de puro trámite de calendario implicó una nueva paliza de parte de los de la Isla del Encanto que anotaron 24 carreras en dos encuentros ante los venezolanos.

Conclusiones

Nadie pone en duda el pundonor y entrega de los jugadores venezolanos que participaron el clásico, pero como declaró el manager de Venezuela Omar Vizquel al término del encuentro de segunda ronda ante Puerto Rico: “No jugamos el béisbol que la gente se esperaba. Las expectativas se quedaron cortas. Sinceramente creíamos que íbamos a jugar un mejor béisbol”, definiendo la actuación de su equipo como: “...lamentable...”.

Una nueva decepción encaja la afición venezolana que confiaba de la selección que se consideraba la más poderosa de las presentadas por Venezuela en los cuatro Clásicos jugados, será para el 2021 cuando se volverá a reclamar el lugar que por historia y estrellas en la Gran Carpa se merece Venezuela en el Olimpo del Baseball.

En el IV clásico mundial no pudo ser.