El UFC 205 será recordado como el primer evento en el que un luchador logró convertirse en campeón en dos divisiones de manera simultánea . McGregor pasó a la historia de la UFC, Eddie Álvarez quedó en el olvido . Ahora el peleador estadounidense de raíces boricuas regresa al octógono para recuperar el camino perdido. En su mente sólo hay un objetivo: una revancha con Conor McGregor. El irlandés es el más luchador más mediático, todos sueñan con medirse a él, pero Álvarez cree que merece la revancha.
Para cumplir su objetivo el estadounidense ya sabe su hoja de ruta. Álvarez se volverá a subir al octágono el 13 de mayo en el UFC 211 . No será ninguno de los combates estelares, pero Eddie sabe que el camino puede que no sea corto. Su rival será el joven Justin Poirier , quien llega de ganar a los puntos a Jim Miller en el UFC 208 . Un pleito que no le seducía, llegó a ratificar antes de cerrarse.
Aun así, la pelea no será sencilla, ya que Poirier ocupa el décimo puesto del ranking del peso ligero y su objetivo es el mismo que el de Álvarez. El estadounidense podría busca una relajación de Álvarez para complicarle el combate con su rapidez . Pese a ello Álvarez cree que es superior y busca una victoria que le haga auparse en ese ranking, donde está en la tercera posición.
Eddie Álvarez quería pelea contra Nate Díaz El regreso de Álvarez al octágono se llevaba barruntando varios días. El estadounidense de raíces boricuas quería enfrentarse a Nate Díaz, último verdugo de McGregor , un combate que tras la cancelación del Nurmagomedov vs Ferguson (1º y 2º del ranking) podía hacer las veces de ‘eliminatoria oficial’. La UFC trasladó la oferta a Díaz, pero este la rechazó. “Me sorprendió cuando le ofrecieron el combate y dijo que no. Pensé que era seguro que pelearía conmigo, así que, no sé qué pasa con él ”, llegó a asegurar Eddie Álvarez.