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PREMIOS AS DEL DEPORTE 2016

Carolina Marín: "En 2016 tocaba Río y ha sido maravilloso"

La onubense ganó el oro en bádminton en los Juegos y este lunes recibió su tercer Premio AS del Deporte.

Alfredo Relaño, director de AS, entrega el Premio a Carolina Marín.
Alfredo Relaño, director de AS, entrega el Premio a Carolina Marín.EFE

Carolina Marín no era ayer ninguna desconocida en el Hotel Palace de Madrid. Ni para curiosos o aficionados que se pasaron por allí (“¡mira, la chica del bádminton!”), ni, desde luego, para los invitados que acudieron ayer a la Gala de los Premios AS. Tampoco para los lectores de este periódico, que ya en las dos pasadas ediciones reconocieron con sus votos el enorme mérito de la pionera que logró escalar a la cima de un deporte hasta entonces reservado para las asiáticas. Este año su tercer galardón era incontestable tras lograr su gran objetivo: “Este 2016 estaba enfocado a Río, salió bien y fue maravilloso”.

¿Cómo es capaz de, año tras año, seguir dando motivos para que su nombre sea ya casi un fijo de este y de los más variados homenajes? Pues quien siga la trayectoria de la campeona olímpica y bicampeona mundial (afortunadamente, cada vez más españoles) sabe de sobra que dando siempre el máximo y asumiendo retos tremendos (sí, tiene aún 23 años), para los que trabaja de forma concienzuda con un equipo de especialistas liderados por Fernando Rivas.

¿Y no le pasa factura esa tensión? Por supuesto. Pero eso se ve menos y ella tampoco se queja. “Este año he tenido molestias, he tenido que ir al médico bastantes veces... ¡Los achaques de la edad!”, bromea refiriéndose a la lesión en el sacro que lleva dándole la lata más tiempo del que le gustaría.

Ayer, mientras era saludada, se hacía fotos, recibía sorpresas durante el acto o se llevaba la ovación de la audiencia, se mostraba sonriente, relajada... luciendo con gracia un precioso vestido morado. Sin pensar que en pocos días debe marcharse a jugar la liga de la India, una competición con los mejores jugadores del planeta y que significará su primer reto del nuevo año. Un 2017 en el que se le volverá a exigir lo máximo. Porque el premio que recibió ayer no sólo era por su oro, sino por todo lo que ha sacrificado para lograrlo.