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DETOCHO

Para supersticiosos: Los pronósticos de la semana 13

Los Cowboys enfrentan su prueba más difícil hasta ahora, mientras que Dolphins y Ravens intentan desenmascararse el uno al otro

Ciudad de México
ATLANTA, GA - NOVEMBER 27: Matt Ryan #2 of the Atlanta Falcons runs the ball during the second half against the Arizona Cardinals at the Georgia Dome on November 27, 2016 in Atlanta, Georgia.   Kevin C. Cox/Getty Images/AFP
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Kevin C. CoxAFP

Ha sido un día difícil. Están por dar las tres de la mañana, mi esposa está enojada (otra vez) y estoy a dieta (sí, otra vez). Disculpen si no soy la lectura más agradable de su jornada.

Para colmo, los Browns descansan esta semana, privándonos de un chiste seguro. Los Patriots no han sido atrapados haciendo trampa _que no significa que no la estén haciendo_ y Jeff Fisher sigue con trabajo. Nada me sale bien.

Pero eso no es novedad para usted amable lector que ha pasado las doce semanas previas leyendo a este humilde redactor fallar pronóstico tras pronóstico, por uno o por 10 puntos da lo mismo. Al igual que la temporada 2016, mis picks se pueden definir con solo dos palabras: consistentemente irregulares.

Esa es la frase elegante para no decir mediocres. Pero hoy, en la madrugada de un día difícil, me siento afortunado. ¿Ya mencioné que mi esposa no me habla? Debe ser por eso.

(Mi esposa no lee este espacio, y si alguno de ustedes se lo hace llegar, yo les haré lo mismo que ella me haga a mí).

Tras esa amable recomendación, vamos a lo que nos concierne, los pronósticos de la semana 13, la de la suerte.

Cowboys (10-1) en Minnesota (6-5): Durante mis más de tres décadas de vida, he pasado por muchas cosas muy difíciles, ninguna más complicada que intentar explicar la realidad de los Cowboys 2016 sin ser acusado de hater, de parcial o cosas peores.

No es mi culpa que Dallas siga sin convencerme, ni la de los Cowboys por tener un calendario marca Acme. Tal vez una victoria el jueves en Minnesota, en donde los Vikes tienen marca de 4-1 (la única derrota ante Detroit en tiempo extra), logre persuadirme, mientras tanto me mantendré escéptico.

La ofensiva de los Vikings es tan peligrosa como un Teletubbie, algo que le viene muy bien a una defensiva de los Cowboys que no detiene ni un taxi. El problema para Dallas va a estar del otro lado, en la unidad que no ha sido puesta a prueba en todo el año: La ofensiva.

La defensiva de Minnesota es tan buena como se anunció. Sabemos que Zeke Elliott no va a correr como Heidi en la pradera, y que Dak no va a tener tanto tiempo para lanzar. El duelo en las trincheras va a ser una pelea de perros de la que Michael Vick estaría orgulloso.

Con cada juego que pasa, la ofensiva de Dallas se ve más potente, en ritmo y confiada. Sería una pena que los frenaran justo cuando empieza diciembre y antes de enfrentarse al único rival que los ha derrotado esta campaña, ¿no lo creen?

Los Cowboys van a ganar, porque Prescott sabe ganar partidos y Bradford no. Van a ganar porque están más saludables. Porque a diferencia de los Vikes, van a contar con su head coach en las laterales (aunque con Garrett eso no siempre es una ventaja).  Dallas va a ganar, pero no, no me va a convencer. Aún. Cowboys por 4.

Chiefs (8-3) en Atlanta (7-4): A veces me pregunto si hay alguien que tenga un trabajo más sencillo que el mío y solo se me viene una persona a la mente: Matt Bosher. Si tuvieron que googlearlo entonces se darán cuenta de que tengo la razón. Sí, el punter de los Falcons.

Bosher ha realizado 26 despejes en 10 partidos, 2.6 por juego o el equivalente a un buen cuarto de los Browns. Así de buena es la ofensiva de Atlanta. Sí, los Falcons ya tienen cuatro derrotas, dos de ellas en casa ante nada más y nada menos que Bucs y Bolts, pero promedian 23 puntos CUANDO PIERDEN. No hay muchos equipos que puedan presumir algo así.

Que me disculpen los 6 aficionados de los Chiefs de habla hispana, pero su equipo tiene exactamente dos triunfos de calidad en su registro de 8-3, las visitas a Oakland y Denver. Nada más. Su ofensiva es mediocre, su defensiva es vulnerable y su mayor virtud es su capacidad parar robar balones.

Atlanta no comete errores, por eso Bosher tiene el mejor trabajo del mundo, porque su ofensiva consigue puntos, muchos y él tiene que entrar a patear un balón dos veces por partido, algo así como futbolista caro y malo.

Al ganar seis de sus últimos siete partidos, los Chiefs han limitado a sus rivales a algo más de 17 puntos por juego. Buena suerte con eso en Atlanta. Kansas City a tener que recurrir a un plan B, y si el plan B requiere que Alex Smith intercambie golpes con Matt Ryan, será mejor que vayan pensando en un plan C. Falcons por 8.

Dolphins (7-4) en Baltimore (6-5): Los Dolphins son un espejismo, los Ravens también. Es por esto que este es un juego intrigante, es como una mala película que no puedes dejar de ver. Dos equipos que hoy estarían en postemporada intentando desenmascararse el uno al otro.

Sí, Miami tiene seis triunfos en fila, pero vencer a Jets, Chargers, Rams y 49ers en semanas consecutivas no es para presumirse, es una obligación. Sí, tienen confianza, tienen talento y tienen un buen coach. Pero también tienen que demostrar su verdadero nivel y aquí hay una buena prueba.

Los Ravens de 2016 tal vez sean el mejor trabajo de John Harbaugh en Baltimore. En verdad. Tienen una marca de 6-5 buena para el liderato divisional con un quarterback con puntería de borracho, un corredor que no corre (créanme, lo tengo en el Fantasy), y una defensiva que es la cuarta mejor de la NFL sin tener un solo playmaker que no se apellide Weddle.

Con muy pocos ingredientes, Harbaugh ha preparado un buen platillo. Pero tampoco es para que le den el premio Nobel del coacheo. Entre sus seis triunfos se encuentran dos veces los Browns, Jacksonville y unos Bengals más tocados que el clan Kardashian.

Ahora llegó el momento de decidir cuál de los dos equipos miente. Es la casa de los espejos, es una reunión entre políticos. Un programa de farándula. Los dos son una interrogante y el domingo tendremos la respuesta. En tanto, la única certeza es que no importa quien pierda, el beneficiado aquí es Pittsburgh. Dolphins por 1.

Giants (8-3) en Pittsburgh (6-5): Las carreras de Eli y Ben van a estar ligadas por siempre. Seleccionados en el mismo draft, ambos con dos anillos de Super Bowl, temporadas por momentos inconsistentes, la capacidad de lanzar el pase increíble y la intercepción absurda y un posible destino común en Canton.

También comparten el hecho de que en estos momentos cuentan con dos de los mejores receptores que ha enviado Dios Padre a este mundo terrenal en Odell Beckham y Antonio Brown. Gracias a ello, sus ofensivas marchan cada vez mejor.

Al ganar dos de sus últimos tres juegos, Pittsburgh promedia 27 puntos por juego. Los Giants tienen 24 puntos por juego en los últimos cuatro desde su semana de descanso.

Sabemos que las ofensivas pueden avanzar casi a voluntad, así que el juego lo decidirá la otra unidad. Aquí es donde vamos a tener problemas para decidir quién tiene ventaja. Los Giants son la quinta mejor en puntos admitidos, pero su racha de seis victorias se conforma de víctimas como Ravens, Rams, Eagles, Bengals, Bears y Browns, no son precisamente los Patriots del 2007.

Por otro lado, Pittsburgh viene de permitir 16 puntos totales en sus últimos dos juegos, ante Josh McCown y Scott Tolzien, nuevamente, no hay un referente.

 Así que esto quedará en mano de los intangibles y los fundamentos: Pittsburgh no ha entregado un balón en sus últimos tres juegos, los Giants cinco en los últimos cuatro. Fin del comunicado. Steelers por 7.

Y como el tiempo es oro, los TurboPicks:

Lions (7-4) en N. Orleans (5-6): Stafford es como la version “Made in Taiwan” de Brees. Saints por 6.

Rams (4-7) en N. Inglaterra (9-2): No va a ser fácil pero… no, ¿a quién engaño? Sí va a ser fácil. Pats por 10.

Broncos (7-4) en Jacksonville (2-9): El siguiente partido puede contener escenas violentas y sexualmente explícitas. Se recomienda discreción. Broncos por 13.

Texans (6-5) en Green Bay (5-6): Houston es una moneda al aire y Green Bay también. Ah pero el mediocre e inconsistente soy yo, ¿no? ¡Qué fácil! Packers por 4.

Eagles (5-6) en Cincinnati (3-7-1): Si creen que no hay nada peor que esto, esperen. Bengals por 3.

49ers (1-10) en Chicago (2-9): Se los dije, si hay algo peor. Niners por 2.

Bills (6-5) en Oakland (9-2): Partido súper engañoso. Aunque no tanto como el récord de los Cowboys o los sostenes con relleno. Raiders por 2.

Redskins (6-4-1) en Arizona (4-6-1): ¿Es momento de que alguien le quite la máscara de Dan Marino a Cousins, ¿no? Cards por 6.

Buccaneers (6-5) en San Diego (5-6): Al igual que todos en la quiniela, esos Bucs me están ganando poco a poco. Tampa por 3.

Panthers (4-7) en Seattle (7-3-1): Uno de estos quarterbacks es un moreno carismático que debe ser una de las imágenes de la liga por varios años. El otro es Cam Newton. Seahawks por 6.

Colts (5-6) en NY Jets (3-8): La gente que hace los calendarios de la NFL se divierte troleando a los que odian los lunes, ¿verdad? Colts por 5.

Descansan y no pasa nada: Browns (0-12) y Titans (6-6).

Eliminator/Survivor: Broncos. Iría con el Bye ante Cleveland, pero por más que busqué no me apareció la opción.

La semana pasada: 10-6

En la temporada: 105-65-2