El Movistar gana al Maribor y se clasifica para la Final Four
Un gol de Pazos en la primera parte y los de Ricardinho y Rivillos a puerta vacía en el último minuto dieron el triunfo (1-3) al equipo español en Eslovenia.
El Movistar Inter ganó 1-3 en Maribor al Brezje, equipo anfitrión, y se clasificó para la Final Four de la UEFA Futsal Cup. En el último partido del grupo C de la Ronda Élite, al equipo español le bastaba con no perder para clasificarse y al final se impuso con cierto sufrimiento pese a lo que señala el marcador, sobre todo en la segunda parte. Los goles de David Pazos en el minuto 13, y de Ricardinho y Mario Rivillos, en el 40, fueron suficientes. Así pasa invicto.
En la primera parte el dominio del Movistar fue claro. Las estadísticas lo demuestran: 20 tiros (tres de ellos a puerta) por solo 6 del Maribor. En el minuto 5, Ricardinho ya había avisado con un disparo al poste. Poco después, en el 7, el equipo local tuvo su mejor ocasión con un lanzamiento de Totoskovic que se fue también a la madera. Pero ahí se acabaron las intenciones eslovenas. El Inter intensificó su presión, movió la pelota tan bien como sabe y terminó llegando el gol. Fue en el minuto 13, por un robo del portero Jesús Herrero, que picó la bola para el desmarque de Pazos. El joven ala gallego controló con habilidad y en carrera lanzó un misil con la derecha que se coló en la portería del Maribor. De ahí al descanso, control español sin sobresaltos.
Nervios hasta el final
El Movistar no bajó el ritmo en la reanudación. Rafael puso en aprietos a Puskar y luego mandó el balón al larguero. Borja estuvo cerca de marcar, acto seguido. Pero cuando más dominaba el equipo madrileño vino el empate del Maribor. Un contraataque bien llevado entre Jandric, el capitán Fidersek y Fetic, acabó con un fuerte y colocado remate de este último que no pudo atajar Herrero. A los anfitriones no les valía el empate y colocaron varias veces a Fidersek como portero-jugador. El Inter se llevó un buen susto con un tiro al palo de Hasanbegovic en el minuto 32, aunque tuvo más oportunidades para lograr el 1-2 (incluido un doble penalti que no convirtió Ricardinho). El Maribor pagó el riesgo del portero-jugador y acabó encajando dos hábiles goles desde campo propio y a puerta vacía de Ricardinho y Mario Rivillos.