Los Vikings se mantienen invictos con un triunfo metódico
Sam Bradford y los Vikings de Minnesota no necesitaron hacer nada espectacular. Con apegarse a los fundamentos fue más que suficiente.
Los Minnesota Vikings mantuvieron su marca perfecta de inicio de campaña con la fórmula de los tres partidos anteriores. Un ataque balanceado, no cometer errores y muchas jugadas defensivas. Su víctima más reciente fueron los Giants de Nueva York que cayeron 24-10.
Los Vikings se apoderaron del encuentro de manera metódica y aprovecharon el primer error del juego, un fumble de Dwayne Harris en una devolución de patada de despeje. A partir de ahí, Bradford y compañía machacaron a la defensiva de Nueva York y Matt Asiata encontró la zona prometida en acarreo de una yarda hacia el final del encuentro.
Sam Bradford se mostró cómodo, más no preciso. ¿A quién le importa si la ofensiva de los Vikings no es explosiva y vertical? Ciertamente no a su defensiva, que se mostró en su forma habitual. Dos intercambios de balón a su favor, 78 yardas terrestres permitidas y una buena cantidad de las 339 yardas permitidas ya cuando el tiempo estaba completamente a su favor.
A diferencia de los tres quarterbacks antes que él, Eli Manning pudo mantenerse de pie. Eso no significa que haya estado cómodo. Completó apenas 25 de 45 intentos para 261 yardas y una intercepción. Su mejor jugada fue una conexión con el corredor Paul Perkins en un pase corto que se convirtió en una ganancia de 67 yardas.
Eso abrió la puerta para que los Giants pusieran la pizarra mucho más decorosa con un acarreo anotador de una yarda por parte de Orleans Darkwa a principios del cuarto final.
Pero Manning jamás pudo sacar provecho de Odell Bechham Jr., Sterling Sheppard o Víctor Cruz, quienes se combinaron para tan solo 12 recepciones y 103 yardas. No es coincidencia. Minnesota ha desmantelado a toda ofensiva con la que se ha encontrado al grado que su inicio de 4-0 ya dejó de ser sorpresa.
Mike Zimmer engrosó su candidatura a Coach del Año al convertir a Sam Bradford en un pasador eficiente y a Minnesota en serio aspirante sin la presencia de Adrian Peterson. En tanto, los Gigantes son un mar de dudas luego de sufrir su segundo descalabro en fila.
Principalmente, deben hacer ajustes en un perímetro que no contó con sus dos cornerbacks titulares, Eli Apple y Dominique Rodgers-Cromartie. Y se notó, especialmente con Charles Johnson ganando 70 yardas en solo dos recepciones y Kyle Rudolph a menudo encontrando duelos favorables al abrirse como receptor y acumular cinco recepciones, todas en momentos cruciales.