Bill Belichick intentará resucitar a Barkevious Mingo
Los Patriots entregan a los Cleveland Browns su quinta ronda de 2017 a cambio de un defensive end que llegó a la NFL en 2013 como estrella y nunca ha alcanzado las expectativas en los Cleveland Browns.
Los Patriots no parecen estar convencidos con su plantilla para 2016. Ayer miércoles enviaron por sorpresa a su center titular, Bryan Stork, a los Washington Redskins y hoy, más por sorpresa todavía, dieron a los Cleveland Browns una quinta ronda por Barkevious Mingo, un defensive end que llegó a la NFL en 2013 con vitola de gran estrella, pero que nunca ha alcanzado las expectativas.
A Belichick le encantan las causas perdidas. Intentar rescatar del abismo a jugadores desahuciados. La realidad es que, como es lógico, muchas veces se estampa, pero su atrevimiento le lleva a segur intentándolo y también en muchas ocasiones tiene éxito, con lo que engrandece su leyenda. Así que hacerse con Mingo, un jugador que en 2013 fue elegido con el sexto pick global del draft, y que según todos los analistas iba a comerse el mundo, parece un riesgo controlado que merece la pena (a pesar de que tampoco tendrán cuarta ronda en 2017 como parte del castigo por el deflategate).
El movimiento tiene su explicación tras la marcha de Chandler Jones a Arizona, que parece haber dejado bastante comprometida la capacidad de la defensa de New England para meter presión a los quarterback rivales. Y sin olvidar que Rob Ninkovich ha sufrido un desgarro en el tríceps y se encuentra también en una enfermería que vuelve a llenarse peligrosamente.
Parece ser que Mingo no tenía ninguna posibilidad de estar en el roster final de 53 jugadores de Cleveland, así que ha visto el cielo abierto con la posibilidad de rehacer su carrera, que languidecía irremediablemente.
En el draft de 2013 fueron elegidos tres líneas ofensivos y tres cazadores de quarterbacks en los seis primeros picks. Los Dolphins se llevaron a Dion Jordan, que no tuvo el arranque esperado en su primer año, y que desde entonces ha ido empalmando sanciones por consumo de sustancias prohibidas. Acaba de reincorporarse al vestuario de los Dolphins después de una sanción de 15 meses y su carrera también parece terminada. Belichick no se ha atrevido a tanto apostando por él. Sí habría sido un sueño para el entrenador de los de Boston poder tener en su equipo al segundo defensive end elegido en aquel draft. Ezekiel Ansah jugó el año pasado la Pro Bowl, lideró el ranking de sacks de la NFC y fue nombrado para el segundo equipo All-Pro después de un temporadón descomunal con los Lions. El tercer end de ese draft fue Mingo, que nunca alcanzó las expectativas en su primera temporada, perdió la titularidad a mediados de octubre, y desde entonces lleva otros dos años pasando sin pena ni gloria por la NFL.
Mingo tiene ahora una oportunidad de oro para empezar de nuevo, pero que nadie se ilusione demasiado, salvo milagro improbable, está a años luz de Chandler Jones o Rob Ninkovich. Aunque con Belichick… nunca se sabe por dónde va a saltar la liebre.