Las guerreras del agua inician el reto de la medalla
"Si estamos al cien por cien y tenemos suerte, ni Estados Unidos podrá pararnos”, advierte Rosser Tarragó. Este martes, debut ante la campeona olímpica (16.40).
El cuento de hadas que vivió la Selección femenina de waterpolo en los Juegos de Londres se traslada ahora a Río. Han pasado cuatro años y aquellas jovenzuelas de 19 años que vivían su primera vez su experiencia olímpica y que irrumpieron con una plata soñada son ahora un poso de sabiduría dentro del agua y quieren superarse. El destino, además, ha querido que el grupo en estos Juegos sea el mismo de Londres, idéntico camino ara alcanzar la misma meta: la final olímpica.
“Si estamos al cien por cien y tenemos suerte no nos puede ganar ni Estados Unidos. Pero es difícil estar siempre a tope, claro”, advierte Rosser Tarragó, la nadadora que simboliza la madurez del equipo español. La de Mataró llegó a Londres siendo la más pequeña, ahora se echa el equipo a la espalda cuando lo necesita. “Somos un equipo en el que todas tenemos potencial. No hay nadie que marque muchos goles, porque todas los hacemos. Esto es algo muy bueno. Esto es lo que nos hace más potentes. En defensa jugamos como un bloque, y esto nos puede hacer grandes”, dijo a AS.
El debut será de aúpa. Una final anticipada. Estados Unidos, imbatible para España menos en el Mundial de Barcelona, en 2013, se mide a las de Miki Oca a las 16:40. Es un partido en el que saltarán chispas, como siempre. “Creo que tenemos más ilusión que en los primeros, aunque las que tenemos experiencia estamos más serias. Antes era una emoción más loca, éramos pequeñas. Tenemos opciones de hacerlo muy bien. Tenemos presión pero no negativa”.
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Hungría y China serán los siguientes partidos. La preparación del equipo de Oca hasta llegar a Río ha sido inmaculada, goleando por ejemplo al equipo asiático. La gran novedad en estos Juegos será la ausencia después de 13 años ligada a la selección de Jennifer Pareja. Tarragó quiere desdramatizarlo y darle naturalidad. “No nos afectó como la gente se piensa. Decidieron que se le acabó estar en la selección, pero hemos perdido muchas jugadoras por el camino. Hemos visto pasar a 30 o 40 chicas por el equipo. No fue decisión nuestra y lo que tenemos que hacer es venir con la mayor actitud posible”, alentó.
Concentradas y aisladas del ruido mediático, centradas en los entrenamientos, las guerreras del agua no se ponen límites en estos Juegos. Ya saben lo que es saborear una plata y ahora quieren el oro. Se han preparado a conciencia para ello.