Mireia se mete segunda en el 400 estilos y apunta a medalla

Una Mireia Belmonte risueña abandonaba a toda prisa la Piscina Olímpica de Río. No era para menos. La nadadora de la UCAM había nadado la segunda mejor carrera de su vida en las eliminatorias de los 400 estilos, prueba inaugural de su complejo programa en los Juegos, con un 4:32.75 que le hará salir esta madrugada en España (3:49) por la calle 5 en busca de su tercera medalla olímpica.

La badalonesa ha nadado por la calle 3, escoltada por Katinka Hosszu y Elizabeth Beisel, dos que serán sus rivales en la final, y se ha tomado la carrera con la misma implicación como si en juego hubiese una medalla. No ha ido con reservas Mireia, que ha salido decidida, directa a por la húngara. A diferencia de otras competiciones, la badalonesa nadó la mariposa con una marca de 1:01.60, por debajo incluso de lo que se preveía y tocó en segunda posición. La espalda trajo una Mireia algo más reservada, que no logró rebajar de 1:10 ese parcial (2:12.58), mientras que en la braza recuperó con margen de mejora (3:30.43). El estilo libre fue el segundo mejor de las participantes en su serie, únicamente superada por la desbocada Hosszu. Una carrera completa que avecina la mejora que puede tener en la final y que le puede reportar el primer metal en Río.

Mireia ya tiene claro quienes serán sus rivales. El guion es el previsto. Hosszu está a otro nivel, al menos eso ha demostrado en las eliminatorias. Sus 4:28.58 (récord de Europa) se quedan a sólo 15 centésimas del récord del mundo de la china Shiwen Ye, quien, por cierto, ha marcado en las series 4:45.86. Está eliminada tras nadar 17 segundos más lento que en Londres 2012. Luego llega la estadounidense Maya Dirado, una amenaza seria (4:33.50). Su compatriota Beisel (4:34.38), la inglesa Hanah Milley (4:3374) y la australiana Aimee Willmot (4:34.08) también se suman a una final que resultará apasionante. María Vilas no ha logrado meterse con un tiempo de 4:42.52.