Carlos Gómez y Pujols dan relevancia a aporte latino
El fin de semana tras el descanso de mitad de temporada no pasó desapercibido gracias a los bats de los toleteros dominicanos de Houston y San Luis.
En lo general, el reinicio de las acciones en Grandes Ligas fue tranquilo para los peloteros latinos, pero los dominicanos Carlos Gómez y Albert Pujols se encargaron de concluir el fin de semana haciendo mucho ruido con sus bats.
Gómez, quien no mandaba la pelota a las gradas desde el 1 de julio y en lo general ha tenido un año complicado con el bat, se destapó ayer con un grand slam que ayudó a los Astros de Houston a apalear 8-1 a Seattle.
En lo que va del mes, Gómez ha pegado de hit en cinco juegos, pero sólo en uno ha conectado más de un imparable.
A su vez, su compatriota Pujols, quien tampoco disfruta de una de sus mejores campañas con un promedio de al bat de .248, tuvo ayer un buen día en la oficina al volarse la barda en un par de ocasiones.
Con su par de cuadrangulares, Pujols remolcó cuatro de las ocho carreras que Anaheim anotó para vencer 8-1 a Medias Blancas.
El promedio de .248 es, hasta ahora, el segundo más bajo en la carrera de Pujols, sólo debajo del .244 que registró la campaña pasada. De hecho, el porcentaje en la caja de bateo del toletero dominicano ha bajado progresivamente desde 2009 cuando fue de .327.
Desde entonces, ha bajado a .312 en 2010, .299 en 2011, .285 en 2012, .258 en 2013 y .272 en 2014.
A quien parece haberle sido muy útil el descanso de mitad de temporada es al venezolano José Altuve, quien ha bateado para .500 (6 de 12) en los primeros tres juegos de la segunda porción de la campaña, con un jonrón y tres carreras remolcadas el domingo en la victoria de Houston sobre Medias Blancas.
A su vez, el dominicano Edwin Encarnación, primera base de Toronto, pegó tres hits en sus últimos dos encuentros, pero uno de ellos fue un cuadrangular.
EL PITCHEO LATINO BATALLA
Si bien el venezolano Carlos Carrasco y el dominicano Bartolo Colón se apuntaron victorias este fin de semana, las actuaciones de los lanzadores latinos estuvo lejos de ser dominante en el primer fin de semana de la segunda mitad de la campaña.
Carrasco, abridor de Cleveland, se apuntó el pasado jueves su sexta victoria de la campaña con labor de seis entradas y dos tercios en las que permitió cuatro hits y dos carreras con una base por bolas y tres ponches.
A su vez, Colón trabajó cinco entradas y dos tercios en las que permitió cuatro imparables y tres carreras, aunque las tres rayitas fueron sucias en el duelo en el que los Mets vencieron 5-3 a Filadelfia el pasado viernes.
Por su lado, Johnny Cueto, no veía la hora de salir de San Diego, ciudad que no lo trató muy bien que digamos durante la semana pasada.
El lanzador de San Francisco, quien cargó con la derrota en el Juego de Estrellas celebrado en Petco Park, sufrió ayer su segundo revés de la campaña en la loma del mismo parque.
Cueto nunca se sintió cómodo y Matt Kemp y Christian Betancourt terminaron por arruinarle la tarde de ayer al conectarle jonrones solitarios en la cuarta entrada al dominicano, quien permitió dos rayitas más en la sexta para dejar su línea de trabajo en cinco entradas y fracción con seis hits, tres pasaportes y cuatro ponches.
La derrota del domingo es la primera que Cueto sufre desde que cayó en su cuarta apertura de la campaña el 21 de abril.
DE 4-1 PARA LANZADORES MEXICANOS
De cuatro abridores mexicanos que saltaron a la loma el pasado viernes, sólo uno logró apuntarse el triunfo.
El regiomontano Jorge de la Rosa (6-6) permitió ocho hits y dos carreras en seis innings con tres bases por bolas y dos ponches para ayudar a Colorado a vencer 11-2 a Atlanta.
A su vez, Jaime García y Yovani Gallardo se fueron sin decisión. García trabajó seis entradas y un tercio y permitió ocho hits y cuatro carreras en la derrota de San Luis ante Miami por 7-6, mientras que Yovani Gallardo toleró tres timbrazos en ocho imparables en la victoria de Baltimore sobre Tampa Bay por 4-3.
Miguel Gónzalez “El Mariachi” no pudo contener a los bats de Anaheim y sufrió su quinto revés del año tras permitir cinco hits y cuatro carreras, una de ellas sucias, en seis entradas y fracción de trabajo.
Sin respaldo de su ofensiva, que sólo pudo producir cinco imparables, González, quien ha perdido cuatro de sus últimas seis aperturas, regaló un pasaporte y recetó seis chocolates.