Las federaciones y Ner Group tratan de relanzar la pelota
La asociación empresarial aporta 400.000 euros en tres años para "lograr un compromiso político y deportivo, pero sobre todo social" en apoyo al deporte de los frontones
La Federación Vasca de Pelota ha presentado un ambicioso proyecto que reúne a los organismos de Bizkaia, Guipuzkoa y Araba para caminar juntas y "relanzar la pelota como algo nuestro desde la base, desde las escuelas de educación básica", con el importante apoyo económico del conglomerado empresarial Ner Group, que aportará 400.000 euros durante tres años, en áreas en las que en ningún caso los jugadores cobren por su participación. Tras varios meses de relaciones y de conocimiento mutuo, las partes llegaron a tres puntos básicos de acción conjunta: gestión, economía y la labor del día a día. "Se trata de lograr un proyecto común a nivel de país sobre la pelota vasca en el que siempre participen las tres federaciones territoriales y la Vasca de pelota", expone el presidente autonómico, Patxi Jauregi. El acuerdo trata de compartir e incluir ideas con el Gobierno vasco, diputaciones y ayuntamientos, así como implicar a los clubes, centros escolares y sociedad en general. Igualmente, y de acuerdo con sus criterios de compromiso con la sociedad, Ner Group ha creado un grupo de unas veinticinco personas voluntarias, que participaran desde el propio consejo de la Federación Vasca, hasta la colaboración y ayuda con los responsables técnicos, "porque no nos limitamos a realizar la labor del clásico mecenas, de ahí está el dinero y nos apartamos", matiza Koldo Saratxaga, asesor empresarial e impulsor del conglomerado.
"Se definen dos líneas de trabajo: uno de logro de sensibilización social y unión entre todos los estamentos mencionados, y otro de líneas de actuación y planificación liderado por los directores técnicos de las cuatro federaciones", han explicado los impulsores del acuerdo. Con el convenio, se trata de hacer que la pelota vasca vuelva a ser uno de los referentes en los colegios y los pueblos, donde la cantidad de deportes que se ofrecen han provocado que en la actualidad en Euskadi haya sobre tres mil federados, a lo que hay que añadir la delicada situación por la que atraviesan las modalidades de herramienta. "La intención es lograr un compromiso político y deportivo, pero sobre todo social que sirva de apoyo a nuestro deporte", sostienen.
Las áreas de actuación se diversifican entre la difusión, la captación de pelotaris, formación, nuevas tecnologías, el fortalecimiento de los propios clubes, la promoción de la pelota entre las mujeres y la revitalización de esas modalidades minoritarias. Se intenta difundir la pelota con una exposición itinerante sobre la historia, modalidades, material y curiosidades. La captación de pelotaris llegará en horario curricular y la promoción de actividades en horario extraescolar. Las escuelas de pelota será un acicate, con la reubicación de pelotaris y la creación do fortalecimiento de los centros. La formación irá encaminada a través de ofertas on line y no sólo las actuales presenciales y a partir de abril se podrá adquirir por territorios y no sólo a nivel autonómico. Las nuevas tecnologías ocupan un espacio importante en el acuerdo suscrito, con recursos didácticos como guías metodológicas y vídeos tutoriales. El fortalecimiento de los clubes llegará ofreciendo recursos como consejos de financiación, estructuración, asesoramiento jurídico y gestión.
La asociación Ner Group, impulsada y promovida por Koldo Saratxaga y constituida formalmente en noviembre del 2010, aglutina, en este momento, a veintiún organizaciones empresariales vascas que reúnen a cerca de 1.400 personas en Euskadi y otras 600 personas alrededor del mundo, con una facturación del orden de 300 millones de euros y una exportación del 80%. Las organizaciones pertenecientes a ner group son: AMPO, Ebi Electrotécnicos, Ekin, Estudio K, Gashor, Grip On, Heroslam, Hurbilekojalea Dendak, Icaza, K2K Emocionando, Lancor, Lejarreta Seguridad, Logos, Panelfisa, Royde Fittings & Bearings, Sarein, Talleres Arreche, Trebeki, Urtxintxa, Walterpack y Zubiola.
Este conglomerado promueve un estilo organizativo "basado en las personas" y con una clara orientación al cliente así como a la eficiencia. Estas organizaciones son diferentes tanto en su forma jurídica (sociedades limitadas y anónimas, cooperativas incluso asociaciones sin ánimo de lucro) como en su tamaño (desde 7 hasta 450 personas) así como en lo que a sectores de actividad se refiere (desde la industria hasta la administración pública, pasando por la educación, arquitectura, servicios, etc.) a quienes les une compartir los valores del nuevo estilo de relaciones, en especial, la ética, la transparencia, la comunicación, la confianza, la libertad, la responsabilidad y la solidaridad.
En Ner Group se comparten conocimientos y relaciones, se hacen viajes conjuntos, pero también se efectúan compras en común con el objetivo de obtener mejores condiciones de compra en telefonía, energía, consumibles, etc. Además de esto, se han ido creado nuevos proyectos tales como lur denok, nerei, nerbreen, y kutxaner. Las organizaciones que componen la firma tienen un fuerte compromiso social e implicación con su entorno que se concreta por un lado en la propia forma de desarrollar su actividad empresarial, manteniendo a toda costa el empleo (una de las señas de identidad del grupo es que no se producen despidos en situaciones de crisis), generando mecanismos de solidaridad interna para apoyar y respaldar a las personas y proyectos más vulnerables (fondo interno de solidaridad, mecanismos de reubicación, Kutxaner como herramienta de financiación interna) y fomentando la igualdad y el reparto de la riqueza generada (mínimas distancias salariales y reparto del resultado entre todas las personas).
Además, Ner Group realiza una intensa labor de compromiso social en su entorno gracias a los fondos aportados por las propias organizaciones (dos y medio por ciento de sus resultados anuales se destinan a tal fin) y gracias al tiempo dedicado por sus voluntarios (dos por ciento del tiempo de trabajo de todas las personas del conglomerado, con el fin de combinar trabajo y sociedad). Desde el año 2010 en el que arrancó la actividad, se han puesto en marcha 130 proyectos, de los cuales un 75% se desarrollan en Euskadi y el resto en países en vías de desarrollo y en los que han participado un total de 963 personas voluntarias y se han invertido algo más de 2 millones de euros. Todo ello dentro de un gran proyecto común enmarcado en la idea de un Desarrollo Humano Justo y Sostenible