El primer gran rival divisional de los 49ers fueron los... Browns
En 2016 se cumple el 70º aniversario de los niners. Hoy repasamos sus primeros años en la AAFC sus grandes duelos con los Browns.
Tras varias semanas hablando de la actualidad más candente de la división e incluso jugando a ser adivinos del futuro, seguramente con pésimos resultados para no cambiar la tónica, este jueves quería echar la vista atrás, muy atrás, para rememorar lo que fueron los primeros años de los San Francisco 49ers como franquicia profesional.
El conjunto californiano no dio sus primeros pasos en la NFL como la mayoría de los equipos actuales, sino que fue miembro fundador de la All American Football Conference (de aquí en adelante AAFC). Esta liga se originó en 1944 como consecuencia directa de la imposibilidad de crear una nueva franquicia de la NFL en Los Angeles. La nueva competición juntó ocho franquicias en varias de las ciudades más importantes del país: Nueva York, Chicago, Cleveland, Brooklyn, Miami, Buffalo, Los Angeles y por supuesto San Francisco. A diferencia de la vieja NFL, los propietarios de la AAFC tenían mucho más poder económico, lo que permitió a la nueva liga hacerle competencia directa a la establecida NFL a la hora de ofrecer mejores salarios a los jugadores. Mientras los equipos NFL seguían viajando en tren, los de la AAFC lo hacían en avión.
El propietario original de la franquicia de San Francisco, Tony Morabito, consiguió en los años anteriores un gran éxito con su negocio de transporte de madera. La decisión de bautizar al equipo como 49ers fue lógica en recuerdo del fenómeno social ocurrido casi un siglo antes por el que cantidad de inmigrantes llegaron a las cercanías de la ciudad en busca de oro y que tuvo su punto álgido en el año 1849.
La AAFC se vería obligada a retrasar un año su inicio por mor de la Segunda Guerra Mundial. Cuando finalmente comenzó en 1946 los 49ers quedaron encuadrados en la división oeste con los Cleveland Browns, Chicago Rockets y Los Angeles Dons. El conjunto de Cleveland estaba entrenado por Paul Brown, ya en aquel momento una leyenda por su periplo universitario en Ohio State y antes en el instituto de Massillon. Su influencia fue clave para que Cleveland formara el mejor grupo de jugadores con diferencia de toda la competición. Nadie les pudo hacer sombra en las cuatro temporadas que duró la AAFC, pero si alguien obtuvo éxito en quitarles algo de protagonismo fueron los 49ers.
Con Frankie Albert como gran estrella San Francisco acabó con un récord de 9-5 en su año inaugural. El pequeño Albert (1.77m y 75Kg de peso) fue a su paso por Stanford uno de los quarterbacks pioneros en la “formación T”, pero no pudo triunfar en la NFL pese a ser elegido en la 1ª ronda del draft de 1942. A pase suyo de 40 yardas, Len Eshmont anotó el primer touchdown de la historia de la franquicia en el partido inaugural de 1946 ante los New York Yankees. En su honor los 49ers entregan desde 1957 (año de su prematura muerte) el premio más prestigioso de la franquicia al jugador que mejor representa su espíritu de lucha y coraje (Anquan Boldin lo consiguió el año pasado).
Los niners perderían su encuentro inicial, pero tendrían el honor de endosarle a los poderosos Browns su primera derrota tras un arranque de 7-0. Tres pases de touchdown de Albert fueron suficientes para superar en su duelo particular a Otto Graham. Sin embargo, Cleveland le devolvería el favor a San Francisco dos semanas después camino del primero de sus cuatro títulos de la AAFC.
Los 49ers se hicieron en 1948 con los servicios de su otro gran jugador de esta era, el fullback Joe Perry. Con él San Francisco montó el mejor ataque de la competición, superior estadísticamente incluso al de los Browns. No obstante, cuando llegó la hora de medirse a las huestes de Paul Brown el resultado fue el mismo que el del año anterior, doble derrota. San Francisco terminó la campaña con un fantástico récord de 12-2, pero por detrás de los imbatidos Cleveland Browns (14-0). Al jugar ambos en la misma división los californianos se quedaron sin poder disputar el choque por el título pese a ser claramente el segundo mejor equipo de la liga, tanto dentro como fuera del campo. Frankie Albert fue ese año Co-MVP junto a Otto Graham.
El punto álgido en la rivalidad divisional entre Browns y 49ers llegaría el 9 de octubre de 1949. Aquella tarde en el antiguo Kezar Stadium San Francisco le endosaría a Cleveland su cuarta y a la postre última derrota en cuatro años de dominio de la AAFC. El resultado final de 58-26 con cinco pases de touchdown de Albert y 155 yardas y dos touchdowns de carrera de Perry puso fin a una racha de 29 partidos sin perder de los Browns, la mayor en la historia del football profesional. Tras el partido, ya de vuelta en su hotel de Los Angeles donde se quedarían una semana más antes de medirse a los Dons, Paul Brown daría uno de sus legendarios discursos: “hay un autobús esperando ahí fuera para llevaros a los estudios de cine (Hollywood). Venga, divertíos, aunque no sé cómo podríais disfrutar. No después de cómo habéis jugado contra San Francisco. Os lo aseguro, quien no hiciera ayer su trabajo y vuelva a fallar ante Los Angeles saldrá fuera del equipo. Me da igual quién seas o lo importante que te creas. Te echaré. Si alguno cree que bromeo que lo intente. Eso es todo”. Por supuesto nadie se montó en ese autobús. Cleveland derrotaría a Los Angeles Dons por un claro 61-14 y posteriormente se tomaría la revancha de San Francisco tanto en su otro compromiso de temporada regular como en el partido por el campeonato.
Acuciada por problemas económicos la AAFC redujo su plantel de equipos a siete en esa campaña final y los organizó en una única división. El último, y más importante, de los nueve duelos entre San Francisco y Cleveland en esta liga se saldó en favor de los Browns por el resultado de 21-7. Tras este intento fallido los niners tendrían que esperar hasta 1981 para poder conseguir su primer campeonato.
Los dos mejores equipos de la AAFC en sus cuatro años de existencia se fusionaron (junto a los Baltimore Colts) con la NFL en 1950 y desde entonces dejaron de compartir división. Tras medirse nueve veces en cuatro campañas, Browns y 49ers sólo se han visto las caras en otras diez ocasiones más en 65 años. La última, el año pasado, un intrascendente triunfo de Cleveland con Johnny Manziel al mando de un equipo y Jim Tomsula al frente de la banda del otro, palidece ante lo que fueron unos primeros enfrentamientos de leyenda. Los Browns ganaron sus duelos directos de AAFC ante San Francisco por un claro 7-2. Como rivales lejanos en la NFL marchan empatados a cinco victorias. Quién sabe, puede que un año de estos Cleveland y San Francisco rememoren sus inicios jugándose una Super Bowl, pero eso a día de hoy sí que parece que sólo lo veremos en Hollywood.