Frosty Peters el hombre de los 17 drop kicks en un partido
Frosty Peters, anotó la friolera de 17 drop kicks de 22 intentados en un partido. Él solo había anotado los 51 puntos del equipo, en el que aún es el récord de la NFL.
El nombre de Forrest Ingram Peters es más que probable que completamente desconocido en los mentideros de la NFL. Si en su lugar decimos Frosty Peters , que es como todo el mundo le conocía, seguramente seguiría pasando lo mismo.
El paso de Frosty Peters por la NFL no puede considerarse brillante, tan solo jugó 25 partidos en cuatro equipos diferentes durante tres temporadas. En 1930 empezó su periplo profesional con los Portsmouth Spartans, actuales Detroit Lions, donde jugó tres partidos. El resto de la temporada, otros 12 partidos, los jugó en los desaparecidos Providence Steam Rollers. Aquella temporada fue su mejor año, anotó cuatro touchdowns, dos de pase, uno de carrera y otro retornando una intercepción. También anotó dos field goals además de siete extra points. En la temporada 1931 jugaría para los Brooklyn Nets, donde jugó un total de 9 partidos, en esta ocasión anotó un touchdown de pase y 2 extra points. Su última temporada en la NFL fue 1932, donde jugó un solo partido para los Chicago Cardinals sin que conste una sola anotación.
Donde sí triunfó Frosty Peters fue en el football universitario. Nació el 22 de abril de 1904, en Creston, Iowa, aunque siendo un niño emigró a Montana. Sus excepcionales cualidades atléticas llamaron la atención de los Bobcats de la Universidad estatal de Montana, que lo acabarían reclutando. En Montana practicó tanto football como atletismo, gran lanzador de jabalina y excelente corredor de vallas. También destacaría como jugador de baseball y golf.
Su gran día lo vivió un sábado de noviembre en 1924. Siendo “freshman” se enfrentó a sus vecinos de Billings Polytechnic, universidad que en 1935 pasaría a llamarse Rocky Mountain College. Frosty Peters jugaba de QB, pero tenía un especial talento para ejecutar los FG como drop kicker, una técnica totalmente perdida en el football actual.
En la primera jugada de aquel partido Frosty Peters rompió la línea de scrimmage y se dirigía la endzone para anotar un touchdown. De repente se detuvo en seco, se dio medio vuelta, se paró en la yarda 10 y desde esa distancia ejecutó un drop-kick para anotar su primer FG. En la siguiente posesión de los “Bob-kittens”, así era conocido el equipo de jugadores de primer año de los Bobcats, el propio Frosty Peters lanzó un pase profundo a Jim Ario, que estaba completamente solo para anotar un TD. Para sorpresa de todo el público, Jim Ario se detuvo en la yarda 15 y hubo que ejecutar el siguiente snap, donde Frosty Peters volvía a ejecutar un drop-kick para anotar su segundo FG.
En las siguientes posesiones de los Bob-kitttens se repetiría la historia, cada vez que tenían una oportunidad para anotar un TD, los jugadores se detenían en seco para que Frosty Peters tuviera otra oportunidad de ejecutar un drop-kick. La primera parte terminó con 9 FG de 14 intentos, 27-0. En el descanso Frosty Peters se dirigió a sus compañeros y les dijo “Ya he tenido bastante, si tenéis una oportunidad de anotar un TD, hacedlo”. Sin embargo el equipo, con el apoyo del Head Coach Schubert Dyche, tenía otros planes, votaron a favor de continuar con el mismo plan en la segunda parte.
Faltando diez minutos para terminar el partido Schubert Dyche decidió retirar del partido a Frosty Peters, que para entonces había anotado la friolera de 17 drop kicks de 22 intentados, él solo había anotado los 51 puntos de su equipo. El record anterior era de 15 FG y se había conseguido en Exeter, California, en un partido de High School, en la NCAA el record eran 7 anotaciones. Tras el partido el Head Coach Schubert Dyche dijo a la prensa “Queríamos conseguir un record mundial para Frosty y lo hemos logrado”
La prensa de toda la nación se hizo eco de la proeza del jugador, entre ellos Bob Zuppke, el legendario Head Coach de los “Fighting I” de la Universidad de Ilinois. Aquel lo acabaría convenciendo para que abandona Montana y jugara para su equipo, considerado uno de los grandes programas colegiales de la época. Frosty Peter aceptó con la condición de que le dejaran practicar en otras disciplinas deportivas, algo que hizo desde 1926 hasta 1929, alternó tanto el football como el atletismo.
Tras su corto periplo por la NFL Frosty Peters se hizo árbitro profesional de baseball, pero nada de lo que se dedicó con posterioridad logró igualar su proeza de aquella tarde de sábado de 1924 cuando consiguió lo increíble, anotar 17 FG de 22 intentos, y todos ellos mediante dropkicks. Este récord de FG, como el propio apelativo del jugador, Frosty, se ha quedado congelado en el tiempo.