Los perdedores de la primera semana de la agencia libre

Sólo puede haber ganadores si hay perdedores, claro. Y de eso también hay en la agencia libre de la NFL. Como he dicho en el artículo de ganadores, decir que alguien ha perdido en un periodo de fichajes es una tontería; no sabemos como van a salir los jugadores, no sabemos si las gestiones con el espacio salarial restante serán buenas o males... pero sí sabemos que algunos equipos, ahora mismo, tienen peor pinta que el año pasado y han fallado en objetivos que tenían entre ceja y ceja para completar su plantilla.

Perdedores

Denver Broncos

No se puede empezar por otros. Era sabido que tendrían un marzo muy duro, porque tenían demasiados juagdores por renovar y una situación salarial complicada. Pero verse a estas alturas sin ninguno de sus dos QBs de la pasada temporada, esa que les dio la Super Bowl, sin una pieza clave de la defensa como Malik Jackson, sin Danny Trevathan, sin C.J. Anderson (al menos hasta el momento no han decidido igualar la oferta de Miami por el corredor)... desde luego, el equipo es notablemente peor. 

Y, encima, con la certeza de que quisieron apurar a Osweiler hasta el final, pues le ofrecieron 16 millones de dólares al año en un desesperado intento de mantenerse aflota. Buscan un traspaso por Kaepernick, ofrecen 12 millones a Fitzpatrick, consiguen a Sánchez en un trapsaso... los Broncos son la viva imagen de la desesperación en el puesto de Qb ahora mismo.

Cleveland Browns

Dijo Adam Schefter, eminente periodista de la ESPN, que los jugadores tratan a los Browns como una universidad: una experiencia de cuatro años y a buscarse la vida en el mercado. Duras palabras para una organización profesional. Pero, en esencia, podrían pasar por reales. En los Browns se está viviendo un éxodo. Dos de sus hombres de línea ofensiva, su mejor unidad, como son Alex Mack y Mitchell Schwartz, se han ido a los Falcons y a los Chiefs respectivamente, Tashaun Gipson ha acabado en los Jaguars y travis Benajmin en los Chargers.

A cambio, no han fichado a nadie. Es cierto que tienen una nueva gerencia deportiva, y un nuevo entrenador, y querrán hacer las cosas a su manera. Pero su manera, digo yo, será tener un equipo profesional de football.

Miami Dolphins

Hay un movimiento que no me cabe en la cabeza por más que lo pienso: quedarse con Byron Maxwell y Kiko Alonso perdiendo una cuarta ronda del draft e intercambiando la primera con Philadelphia, esto es, con los Eagles escogiendo en el #8 y los propios Dolphins en el #13.

El contrato de Maxwell es una losa inmensa, Alonso un jugador que cuesta imaginar sano durante 16 partidos ¿y para quedártelos sales del top 10 del draft? Increíble, un movimiento absolutamente increíble.

Más entendible, pero doloroso aún así, puede ser perder a Olivier Vernon y Lamar Miller, tener que sustituirlos por Mario Williams y C.J. Anderson (aún está por ver). Sin embargo, el resultado magro es francamente decepcionante.

Green Bay Packers

Quisieron a Matt Forte. Acabó en los Jets. Quisieron a Danny Trevathan. Acabó en los Bears. No es que lo hayan hecho mejor o peor que otros tantos equipos que han pasado de la agencia libre, es que, en su caso, y dado que llueve sobre mojado, da un poco de rabia verles no tomar parte en un negocio que algunos entendemos que podría convertirles en favoritos a ganar la Super Bowl. Un año más, habrá que esperar a milagros de Aaron Rodgers y que el resto de las piezas rindan todas al máximo nivel y sin muchas lesiones. Quizás sea demasiado esperar, como hemos visto en los últimos años.