Su esencia: los Yankees sólo se miden en su propia historia
Como todos los equipos dominantes en su competición llueva o truene, los New York Yankees sólo les preocupan los New York Yankees.
Como todos los grandes equipos del mundo, aquellos que son dominantes en su competición llueva o truene, sea en blanco y negro o en color, los New York Yankees sólo les preocupan los New York Yankees. Por supuesto, su pelea histórica y sin fín con los Boston Red Sox ha hecho que se escriban ríos de tinta y se rueden kilómetros de celuloide, pero eso no quiere decir que les hayan tratado de igual a igual, al menos no hasta las míticas series del 2004 en las que los de Boston rompieron más de 80 años de vejaciones, amarguras y tristes derrotas. Los Yankees también tienen una rivalidad en casa, con los Mets, pero la tratan aún con más desprecio que la de los Red Sox. Los Yankees se miden en los Yankees.
Propietario: Hal Steinbrenner*****
Tras la muerte de su padre, George, en el año 2010, heredó el control del equipo junto a su hermano Hank, aunque se le atribuye a Hal una mayor implicación en la gestión del equipo. Son una de las grandes familias asociadas al mundo del béisbol en Estados Unidos y, realmente, parte esencial de la historia del mismo.
Manager general: Brian Cashman****
El trabajo de general manager de los New York Yankees es uno de los más envidiados en todo el deporte mundial. Cuando cuentas con una afición absolutamente fiel, unos contratos televisivos descomunales, y unos dueños capaces de darte todo el dinero y la paciencia del mundo, pues tu puesto es pura felicidad. Eso explica que Brian Cashman lleve en el equipo desde 1986 y sea el principal referente del apartado deportivo desde la década de los 90. Por supuesto, la exigencia siempre es máxima, pero hay que reconocerle a Cashman que nunca se ha arrugado ante las críticas ni los malos años, y sigue teniendo al equipo en la cima... aún sin ganar.
Entrenador: Joe Girardi****
En el año 2008 Joe Girardi se convirtió en el entrenador de los Yankees y tan sólo un año después, en el 2009, se alzaba con el título de las World Series. Parecía que se avecinaba otra de esas eras en las que los ‘Bronx Bombers’ se convertían en intratables y acumulaban un anillo tras otro. Pero no. Girardi se ha visto envuelto en una serie de problemas extradeportivos, como la sanción por dopaje de Alex Rodríguez, y, ahora mismo, con una gestión de egos muy complicada: en su equipo hay un montón de jugadores con muchos años y muchos millones en sus contratos que quieren que se les trate como las megaestrellas que son... o que fueron, para ser exactos. No es agradable.
Su gran estrella: Alex Rodriguez
Tras su suspensión por dopaje, y el intento de los Yankees de echarle del equipo, nadie esperaba la resurrección que tuvo A-Rod en el año 2015. Pero dudar de figuras tan grandes tiene esta clase de riesgos: Rodríguez sacó todo su talento para recordarnos quien fue.
Estrella ofensiva: Mark Teixeira
Si increíble fue la resurrección de Alex Rodríguez, poco más o menos lo mismo se puede decir de la de Mark Teixiera. Claro, éste no se tiró todo un año sancionado, pero tanto el 2012, como el 2013 y el 2014 fueron las peores temporadas de su carrera, lo cual tiene toda su lógica pensando que alcanzó su cima en el 2009, año del último título de las World Series de los Yankees... y que cuenta con 36 años. Pero, mira tú, en el 2015, contra todo pronóstico, volvió a recuperar la potencia de bateo de sus buenas épocas y se marcó una campaña digna de ser un All Star legítimo. 31 home runs y 79 carreras impulsadas así lo atestiguan. La duda, como con todo el equipo, es si podrá repetir lo mismo en 2016, con un año más en sus huesos.
Pitcher estrella: Masahiro Tanaka
Cuando Masahiro Tanaka llegó a la MLB lo hizo en calidad de megaestrella japonesa. En la liga de su país de origen era poco menos que un Dios y los aficionados de los Yankees estaban genuinamente emocionados por verle lanzar. Y el caso es que, de inicio, cumplió con las exageradas expectativas. El problema es que se lesionó en ese mismo primer año, el 2014, y en el 2015 estuvo primero sin jugar y, después, limitado tanto en capacidad como en uso por parte del equipo. Si los Yankees quieren tener una rotación firme de lanzadores, más allá de un bullpen que promete ser un espectáculo en sí mismo, han de comenzar por recuperar al mejor Tanaka y verle como la gran estrella que un día todos pensamos que podía ser.
Yankee Stadium: los espíritus cruzaron la calle
Los espíritus de la victoria se movieron del viejo Yankee Stadium al otro lado de la calle 161 Este en 2009. Los Yankees inauguraron nuevo estadio, prácticamente una réplica de las anteriores instalaciones que disfrutaron triunfos durante ochenta años, en el Bronx y con el vigesimoséptimo título de la historia esa misma temporada. 49.600 personas caben en el estadio con una popular zona de bleachers repleta de típicos neoyorquinos, por lo que no es recomendable ir con una camiseta de los Red Sox.
Tierra de zurdos.
Como en el antiguo Yankee Stadium, el porche que hay en el right field es muy propicio para los zurdos. La cercanía respecto al home plate invita a sacarla del campo pero pasa algo parecido justo al lado contrario.