NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

ATLETISMO | REUNIÓN VILLA DE MADRID

Beitia: "Me emociona estrenar la pista cubierta de Madrid"

La cántabra será la gran estrella de la reunión que supone estreno del polideportivo Gallur y el regreso del atletismo bajo techo a la capital.

Ruth Beitia.
Esteban Cobo

Ruth Beitia será este viernes el gran reclamo de la Reunión Villa de Madrid de pista cubierta, en el polideportivo Gallur, en Carabanchel, que supondrá el regreso del atletismo indoor a Madrid 11 años después.Estoy encantada. Me apetecía mucho. Es emocionante poder estrenar la pista y encima en un mitin relevante e internacional. Y además, es una buena oportunidad probarla para el Campeonato de España de la semana que viene, que es una de mis pruebas favoritas. Me encanta la pista cubierta. Todo es más cercano, más familiar... El público de aquí es muy entendido de atletismo, le encanta y siempre es un placer saltar en Madrid ”, contaba Ruth a AS.

En Madrid, Ruth Beitia fue plata europea en 2005, en lo que supuso su primera gran medalla internacional con un vuelo de 1,99, sólo por detrás de la rusa Chicherova. “Guardo muy buen recuerdo. El Palacio se cayó. Estaba saltando con el público y la sensación fue de lo más agradable. Tengo muchas ganas de revivir ese momento”, recuerda la cántabra, de la última vez que se vio atletismo bajo techo en la capital. De los 11 medallistas que hubo en aquel campeonato, sólo ella estará en la rentrée del atletismo indoor en Madrid. Ahí sigue, con sus 36 años, en la élite mundial.

Esta temporada, Ruth lleva dos 1,94 y un 1,95 y tras “muchos entrenamientos” apunta a marca personal en el flamante Gallur donde se las verá con la italiana Trost (2,00) y la nigeriana Amata (1,93). “Me encuentro bien y deseo aquí en Madrid mejorar esos 1,95”, relata la santanderina, que afina su forma de cara a los Mundiales de Portland (18-20 de marzo). “Por supuesto, que los estoy preparando”. Allí no estará Chicherova, porque las rusas están sancionadas. “Eso no es una situación que haya elegido yo, ni ellas”, sentencia Ruth, centrada en volar en Madrid.