Harvey y Fernández deben ser tratados como estrellas
Tanto Mets como Marlins tienen un problema, y es que no saben si darle las enormes cantidades de dinero que requieren sus estrellas.
El debate a apenas un día de que los lanzadores y receptores se reúnan en los primeros días del entrenamiento primaveral, el mundo de las Grandes Ligas está inmerso en una polémica con nombres y apellidos; Matt Harvey y José Fernández.
Ya todos conocemos que pasó en postemporada, y anteriormente, con las declaraciones de Matt Harvey donde anteponía su lastimado brazo a lanzar más de 180 entradas en una misma temporada y el riesgo de lesión que eso conllevaba. Ahora, deben renovarlo y por un contrato multimillonario. Recordemos que Matt Harvey, abridor de un Juego de las Estrellas y uno de los mejores lanzadores derechos de toda la Liga Nacional, únicamente cobraba hasta la fecha medio millón de dólares de forma anual. Otros lanzadores de la talla de Zack Greinke, por ejemplo, cobrán 60 veces más que él, y tanto el jugador como su agente no lo ven justo.
Mets, con el malestar de los aficionados pero con el respaldo de Matt Harvey, duda en darle las cifras estratosféricas que pide Harvey. Cinco años con 110 millones (22 millones anuales), Seis años con 150 millones (25 millones anuales), o 190 millones en siete años (27,14 millones anuales). Cifras de crack. Pero, Mets hoy por hoy no podría permitirse una inversión tan grande si jugadores como Noah Syndergaard, o Jacob deGrom siguen con esa proyección, pues también pedirían contratos muy altos.
Lo mismo pasa con José Fernández. El joven cubano es posiblemente el mejor lanzador joven de toda la liga, y si le respetan las lesiones (que de momento no lo han hecho) puede llegar a ser un TOP 3 en lanzadores de la MLB. El problema es el mencionado anteriormente por los Mets. Giancarlo Stanton consiguió un contrato de 325 millones de dólares en 13 años, y ahora José Fernández querrá una renovación acorde a la gran afición que mueve, a ser una estrella mediática, y a conseguir ser un jugador líder en su posición. Sin embargo, la gerencia de los Marlins se vio involucrada en múltiples traspasos donde José Fernández tenía un pie y medio fuera de Miami. Ahora, éste quiere verse ‘indemnizado’ y los Marlins dudan en que hacer.
Y yo, personalmente, no entiendo estas dudas en ambos casos. Mets no sería nada sin Harvey y Miami no sería nada sin Fernández. Ambos volvieron esta temporada de la fatídica lesión de Tommy John, y fueron las mejores noticias de ambas escuadras cuando llegaron. Ambos son jóvenes y de conseguir contratos largos, los equipos al menos se podrían asegurar tenerles en sus filas prácticamente todas sus carreras deportivas. A los cracks hay que darles lo que pidan, siempre y cuando no lleguen a unas cífras que tengan que hipotecarse de por vida. Mets tiene dinero, y Miami mucho más. ¿Por qué no darles lo que pidan?. Ambos equipos necesitan de sus servicios para seguir arriba y para aspirar a conseguir el campeonado de una división, lo cual es su objetivo.