El sistema de granjas son el futuro en la MLB
El béisbol profesional ha organizado su cantera en el clásico "farm system" desde hace décadas y es hora de ver qué equipo está mejor colocado.
Recientemente, la publicación más prestigiosa de baseball en Estados Unidos (Baseball America) hizo público su anual ranking de las farm system de todas las organizaciones. Hay verdadera obsesión por evaluar las granjas de los equipos. De hecho, no sólo Baseball America, casi todas las publicaciones o webs especializadas en baseball tienen, mínimo, un periodista que todo el año publica actualizaciones de promesas e informes sobre las granjas de un club determinado. Obviamente, este análisis no es la pura verdad, nos estamos basando en la opinión de unos pocos expertos, pero sin duda, es una referencia para observar quién hace mejor el trabajo de base. En el artículo de hoy repasamos los puestos más significativos.
El primer puesto es para Los Ángeles Dodgers. La histórica organización de California está invirtiendo mucho dinero en su granja. No solo adquiere buenas promesas en el draft amateur, también lo está haciendo con las firmas internacionales. Y, de momento, no le importa pagar las multas por excederse de su presupuesto para esas firmas internacionales. Esto le permite dar 25 millones a Erisbel Arruebarrena y tenerle durante muchos meses apartado del diamante. El zurdo mexicano Julio Urias y el jugador de cuadro Corey Seager (mejor promesa de todo el baseball para esta publicación) lideran una granja llena de talento.
El segundo puesto es para Houston Astros. Llamativo ascenso desde el 10º una vez que en el análisis ya no entra, por ejemplo, Carlos Correa. Los texanos tienen un futuro brillante, su granja rebosa talento y su alineación ya es de lujo. Todos los expertos coinciden en que los Astros tienen la mayor cantidad de talento en pitcheo. Eso le permite, por ejemplo, no acusar el lujo de no firmar a una elección nº1 del draft. Brady Aiken fue seleccionado en el primer puesto del draft 2014, pero unos problemas en el codo hizo que Astros redujera mucho su oferta y el joven abridor no firmó con los Astros. Tras pasar la lesión, acabó en Cleveland Indians.
En el tercer lugar llega la gran subida del año: Atlanta Braves. Suben desde el 29º puesto de la tabla. Una subida espectacular argumentada en los muchos traspasos que realizó la gerencia para tirar abajo el antiguo equipo y enfocar los siguientes pasos en el equipo que estrenará el nuevo estadio de los Braves. Una organización que sabe lo que hace desde hace muchas décadas.
En la parte alta de la clasificación encontramos organizaciones en plena reconstrucción como Philadelphia Phillies (8º) o Milwaukee Brewers (9º). Equipos que llegan de los últimos puestos y que gracias a los cambios realizados de su talento por talento joven, logran armar un buen grupo de peloteros para el futuro.
En mitad de la tabla encontramos a St. Louis Cardinals. Su 14º puesto nos alerta una vez más del gran trabajo de base que hace la organización de los petirrojos. Ganar 100 partidos no es fácil y ellos lo hicieron, pese a que no lograron avanzar demasiado en postemporada. Pero el buen trabajo, acaba dando sus frutos y los Cardinals siempre logran que sus promesas acaben siendo diferenciales en postemporada. En estos últimos años han basado su granja en acumular mucho talento desde el montículo. El "Tsunami" Carlos Martínez es la última gran joya sacada de una granja históricamente muy productiva.
En el 17º puesto encontramos a los New York Yankees. Llamativo puesto, vienen mejorando sensiblemente, pero es un puesto muy bajo para una organización que debería desarrollar más a sus jóvenes peloteros. Con un presupuesto ilimitado, el buen hacer de LA Dodgers les deja algo en evidencia. Los altos contratos de su veterana alineación, deja con las manos atadas a Brian Cashman de cara a la firma de agentes libres o a la hora de negociar un cambio. Por tanto, tener talento barato en la granja sería una gran vía de escape para ellos. Esa cuestión la vienen arrastrando desde hace años, incapaces de reforzar su anémica rotación. Únicamente, la buena noticia de Severino, parece que les permitirá escapar de un aprieto que debe sonrojar a la gerencia ejecutiva de los Bombarderos del Bronx.
La gran caída es la de los Chicago Cubs. Descienden desde el primer puesto al 20º. En cierto modo es algo normal. Este año han ascendido al equipo mayor: Kris Bryant, Jorge Soler, Javier Báez, Addison Russell y Kyle Schwarber. Es decir, sus cinco mejores promesas. Pese a ello, Theo Epstein está convencido de que deben mejorar y crear una granja que pueda dar una mano al equipo en cualquier momento. Contrariamente a los Astros o los Cardinals, Epstein basó su proyecto en grandes bates. El punto negro de la granja cubbie es la falta de grandes brazos. Y eso ya lo acusó Chicago durante la temporada. Con un Arrieta agotado y un Lester que en su primer año no mostró lo que puede dar, pese a grandes tramos de temporada, no hubo una alternativa fiable para dar descanso a los dos grandes brazos del equipo. Y esa cuestión se acentúa más tras el bajón de Kyle Hendricks o Jason Hammel por fatiga. Chicago necesitaba ayuda en el montículo y no lo obtuvo por su deficiente nivel en la base. Sin duda, algo que mejorar para Theo Epstein y su equipo de ejecutivos.
El último puesto es para dos organizaciones que no llaman la atención por su buen hacer gerencial. Los Miami Marlins (29º) viven perpetrados en los últimos puestos de estas clasificaciones. José Fernández parece un único oasis en todo el desierto. Jeffrey Loria gastó mucho dinero en llenar de talento el lineup el año pasado y no logró llevar victorias a la Florida. El futuro, pese a retener a Stanton con un contrato excesivo, es bastante negro. Le acompaña en el último lugar Los Angeles Angels. La errática era Dipoto deja muy mal parados a una organización que debe seducir a Mike Trout. Una de las peores rotaciones de las Grandes Ligas y una alineación más que sospechosa puede hartar al mejor jugador de este deporte. 30º en 2014, 27º en 2015 y 30º en 2016. Poco talento en la granja, una rotación débil y una alineación que dependerá mucho de si Pujols está sano o no. En una división donde los rivales se están armando hasta los dientes, el futuro de los Angels se torna excesivamente nublado.