Dallas ganó un duelo aburrido con el final más cardiaco posible
Tres cuartos somniferos dieron lugar al último minuto más loco de la temporada. Dan Bailey demostró, una vez más, ser el mejor kicker de la NFL y convirtió el FG de la victoria para Dallas.
Los Dallas Cowboys vencieron a los Redskins 16-19 en Washington. Tres cuartos somniferos, por la nula producción ofensiva de ambos equipos, precedieron el último minuto y medio más cardiaco de la temporada. El duelo de Monday Night que todos ansiamos se disputó entero dentro del último 'two-minute warning'.
Una ida de olla de DeSean Jackson, que complicó en exceso un retorno decidiendo correr hacia atrás en 'U' (con empate y menos de dos minutos en el marcador), hizo un fumble y le sirvió el partido en bandeja a Dallas.
El receptor estrella de los Skins quiso repetir la mítica jugada del 2010, en la que hizo un retorno de punt increíble para ganar el partido ante los Giants. Él pensaba que se la estaba jugando a empezar desde la yarda 10 o marcar un legendario TD, pero al final resultó en balón para los Cowboys.
Después, el partido estaba en manos de Dallas para dejar correr el marcador y sentenciar con un field goal. Pero McFadden anotó un touchdown que, ironicamente, le dio vida a los Redskins que ahora tenían 1:15 minutos y dos time-outs para igualar el partido.
Y el guión era perfecto para DJax... El hombre que más ansiaba redimirse de todo el planeta lo hizo atrapando un pase largo de 28 yardas de Cousins. Lo había hecho. Nadie hablaría el día siguiente de su error garrafal. Ah, pues iba a ser que no.
El reloj aún tenía 00:49 y los Cowboys también tenían timeouts.
Un gran retorno a posteriori de Whitehead hasta la 44 de los Cowboys casi sentenció el partido. ¿El motivo? La pierna más fiable de la NFL estaba en el banquillo visitante: Dan Bailey.
Tras un par de jugadas sencillas para avanzar poco a poco, el kicker convirtió un field goal de 54 yardas que selló la victoria de Dallas.
La NFC Este se convierte, de esta manera, en la NFC Sur del año pasado, con cuatro equipos con récords negativos y todos con opciones a ganar la división pero con el Wild Card muy difícil.
El resultado de este partido hizo suspirar de alivio a los Giants (5-6), festejar a los Eagles (5-6) y dar esperanzas a los Cowboys (4-7). A los Redskins, en cambio, le recuerda que son los Redskins del siglo XXI y eso conlleva este tipo de situaciones surrealistas.
Sean Lee, OLB de Dallas, se merece una mención digna por su tremendo partido defensivo y constante presión a Cousins. Washington, por su parte, tendría que escribirle a Goodell para que no le deje jugar nunca en horario nocturno (en 'prime time' tiene un récord de 1-8 en las últimas tres temporadas).