Alexandrina Barbosa hace de Mangué para ganar a Rumanía

Con la derrota ante Rusia de ayer, sin Marta Mangué lesionada, apareció Rumanía, uno de esos rivales que se le atragantan a España, porque campeonato tras campeonato parece que le tienen cogida la medida a las españolas. Unas veces porque su primera línea es letal, y otras porque su portera lo atrapa todo, el caso es que es de las selecciones que meten miedo. Es decir, que en esta jornada, tercera del Campeonato, a las Guerreras le venía todo encima.

Y parecía que sí, que se iba a repetir la historia, con Cristina Neagu marcando unos goles de auténtica artillera desde los nueve metros, y con Paula UIngurenau tocando balones. Pero no se descompuso España, asumió el primer vendaval y se asentó en el juego con dos cambios, el tándem Nerea Pena-Macarena Aguilar sólo en ataque, y con Lara González, Eli Chávez y Patricia Elorza en el centro de la defensa, que pasó del 6-0 al 5-1 y acabó en 6-0 en la primera parte.

Y, por si fuera poco, Alexandrina Barbosa dio ese salto de la calidad que siempre se espera de ella. Hay veces que parece cohibida, como si quisiera ser una más. Pero en este partido no estaba Marta Mangué, una especie de hermana mayor en la que se ve reflejada. Tuvo que jugar en defensa y en ataque, y de avanzada. Y su partido fue redondo, con goles en momentos importantes, con recuperaciones, con robos, con ayudas. Fue la jugadora del partido, en competencia con Nerea Pena (espectacular), con Macarena Aguilar (forzó cinco penaltis), con Carmen Martín (un seguro).

España, poco a poco, enjugó las diferencias, y se fue al descanso con un gol de ventaja. Lo que pasó en la segunda parte fue una prueba más de un equipo que confía en sus fuerzas frente a otro que, maniatado por la defensa y por la actuación de Zoqbi en la portería, perdió la fe en lo que hacía, y por una vez dejó de ser un ogro para terminar como manso corderito en manos de las Guerreras que se dieron un festín para conseguir ese claro 26-18, ocho tantos que pueden tener su valor en posibles triples empates. Una prueba de ese control español fueron las tres pérdidas por las 14 de las rivales,. Y ahora, a descansar hasta el jueves, que toca Puerto Rico, rival sencillo, y eso significa que a lo mejor se puede recuperar a Marta Mangué para jugar algo contra Noruega.