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SERIE MUNDIAL | NEW YORK METS - KANSAS CITY ROYALS

La reacción de Kansas City empieza a no conocer límites

Kansas logra su enésima remontada, doblegando nuevamente al closer de los Mets de Nueva York y está al borde lograr su primer título en 30 años. (9-4).

Actualizado a
Los Royals están a un partido de ser campeones de la serie mundial
ELSAAFP

Cuando se rememora lo que está siendo la postemporada de la MLB, uno se hace más y más a la idea de que el destino ya ha escogido un vencedor en las Series Mundiales. Obviamente, no son los Chicago Cubs, que seguirán aguardando un año más a su oportunidad. Tampoco son los Toronto Blue Jays, el equipo que cautivó a toda la competición con unos últimos dos meses prodigiosos. Y menos parece que lo van a ser los New York Mets, poseedores de una formidable rotación de pitchers que se ha visto ayudada por un ataque más que decente pero con una defensa cuestionable.

Ese equipo al que ha escogido el Destino tiene un nombre y son los Kansas City Royals.

El equipo dirigido por Ned Yost ha vuelto a protagonizar su enésima remontada de la temporada, imponiéndose por 5-3 y se coloca 3-1 en el parcial de unas Series Mundiales que corren serio peligro de no volver a regresar a Kansas City.

El único retorno que se avecina en un futuro no muy lejano bien puede ser la clásica parada, el desfile por el centro de la ciudad para celebrar su primer título desde 1985.

El enigmático duelo de lanzadores entre el veterano Chris Young y el rookie Steven Matz nos deparó lo que se aventuraba al inicio, un partido en el que los pitchers relevo de ambos equipos iban a asumir un enorme protagonismo y ahí es donde los Royals se manejan como pez en el agua.

Sin embargo, el inicio de encuentro fue muy prometedor para ambos lanzadores, especialmente para el joven Matz que demostró que la capacidad de swing y fallo no es propiedad exclusiva de Noah Syndergaard, pitcher titular del partido anterior, y fue capaz no sólo de contener a los bateadores de Kansas City sino lograr numerosos strikeouts que prometían un panorama ilusionante para la afición de los Mets.

Por otro lado, la buena línea demostrada por Young y que tiene su precedente más inmediato en el excelente relevo del primer partido, tres entradas sin carreras y sin hits para obtener el triunfo, se vio cortada de raíz por el magnífico home run del novato de los Metropolitanos, Michael Conforto, que inauguraba el marcador del cuarto choque de la final cuando se cumplía la tercera entrada antes de que Curtis Granderson lograse un globo de sacrificio para situar el 2-0.

Las reglas de la Liga Nacional y la obligatoriedad de los pitchers a tener que batear obligó a que Young fuese sustituido por Kendrys Morales que intentó dar continuidad a la reacción inmediata del ataque de los Royals tras el doble de Salvador Pérez y el single que impulsó carrera de Alex Gordon en la quinta..

Ante ese panorama, Ned Yost se vio obligado a tener que recurrir a su bullpen, cuyo primer exponente, Danny Duffy, dejó que Conforto la volviese a sacar del campo para situar el 3-1. Pero ahí acabó la productividad de los locales a la hora de sacar partido al bullpen rival.

Los Royals lograron al fin sacar del partido a Matz en la sexta entrada y sólo una acertada combinación de Jonathon Niese y Bartolo Colón logró evitar que empatasen el partido tras la carrera de Ben Zobrist que puso el 3-2.

El error del segunda base de los New York Mets, Daniel Murphy, cometió un error clave en el cuarto partido de las Series Mundiales.
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El error del segunda base de los New York Mets, Daniel Murphy, cometió un error clave en el cuarto partido de las Series Mundiales.Noah K. MurrayUSA Today Sports

Terry Collins tenía un plan y es que el trío Addison Reed-Tyler Clippard-Jeurys Familia lograsen cerrar el encuentro con los nueve outs que restaban. La primera parte de la fórmula funcionó pero la debacle llegaría en la octava entrada. Un prodigioso turno de bateo de Lorenzo Cain, que luchó como un león para sacar una base por bolas tras estar con la cuenta 0-2 y que llevó a su compañero Zobrist hasta la segunda base, obligó a Terry Collins a echar mano de Jeurys Familia para los cinco outs que restaban y el marcador 3-2 a su favor.

Pero el béisbol y octubre tienen cosas como esta y es que un error de Daniel Murphy en una bola rasa impulsada por Eric Hosmer, evocando recuerdos del primera base de los BoSox Bill Buckner en 1986, abrió las puertas y los visitantes las aprovecharon.

Los Kansas City Royals son como un gran tiburón blanco. En cuanto huelen sangre, son un depredador incontenible. Los Houston Astros pueden confirmarlo. Los Toronto Blue Jays no pueden sino asentir con la cabeza. Y por segunda vez en estas series, los New York Mets vuelven a desperdiciar una ventaja a cinco outs del final que hubiera devuelto la serie a Kansas City.

Ni siquiera un amago de reacción contra Wade Davis en la novena pudo tener continuidad ante el grave error de Yoenis Céspedes que salió tras el contacto de Lucas Duda y que fue fácilmente eliminado en una doble jugada.

A todo esto, el duelo de lanzadores del primer partido, Matt Harvey para los New York Mets y Edinson Volquez de los Kansas City Royals volverán a verse las caras para el quinto y potencial último partido.

Los New York Mets sabían que ganar no iba a ser sencillo y tendrán que recurrir a la épica para devolver la serie a Missouri. Ya se sabe que la noche es más oscura justo cuando va a amanecer y todo esto va a ser una prueba de la fuerza de voluntad de los neoyorquinos.

De las 45 ocasiones anteriores en las que las Series Mundiales se han puesto con un parcial de 3-1, 39 veces han acabado con victoria por el equipo que iba con ventaja (86.7%). La última vez que se remontó un 3-1 fueron precisamente los Kansas City Royals que lo lograron en 1985.