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SERIES MUNDIALES

World Series Episodio II: Johnny Cueto que estás en los cielos

La decisión de traspasar tres promesas a Cincinnati para obtener a cambio a Johnny Cueto queda totalmente justificada tras la última actuación.

 Salvador Perez,  Johnny Cueto y Pedro Grifol celebrando la segunda victoria de los Kansas City Royals.
Christian PetersenAFP

Al otro lado del Atlántico, en un campo de béisbol muy lejano….

Los Royals reflexionaron sobre su derrota del año pasado y llegaron a la conclusión siguiente: quién a bullpen mata a bullpen muere. Ellos murieron el año pasado y por eso, en el cálido verano, reforzaron su cuerpo de lanzadores con el dominicano Johnny Cueto. La intención de esta adquisición era con vistas a mostrarse más sólidos en las Series Mundiales.

Y el Clásico de Otoño llegó y en él, contra todo pronóstico, se encuentran los Royals. Tras un primer partido antológico, situaron a Cueto el segundo día como lanzador para viajar con ventaja de dos partidos a la ciudad que nunca duerme.

El día D y la hora H Cueto pisó la arena, pero no la de la playa de Utah u Omaha en Normandía sino la del montículo del Kauffman Stadium. Y mientras por primera vez en octubre deGrom naufragaba, Cueto sólo concedía dos hits y una carrera. Los Reales, fieles a su línea, siguieron la fábula de la hormiga y granito a granito sumaron siete carreras y se llevaron la victoria a su zurrón.

Las nueve entradas estuvo Cueto en la loma, como Luke Skywalker contra la Estrella de la Muerte, ante la impotencia de unos Mets que veían como uno tras otro sus bateadores eran eliminados. Para poner en perspectiva su actuación valga el siguiente dato, Cueto es el primer pitcher de los Royals que lanza durante un partido completo en la Serie Mundial desde que lo hiciera Bret Saberhagen en 1985 en el séptimo encuentro contra los Cardinals.

Ahora la serie viaja a la gran manzana con unos Metropolitanos que cada vez tienen más complicado emular a los Amazing Mets del 69. Se encuentran en el fondo de una sima a la que han caído tras la derrota en ese primer partido que se les escapó de las manos. Para comenzar a revertir la situación se encomiendan a que el brazo de Syndergaard se parezca al martillo de Thor. Pero la esperanza es lo último que se pierde y los Mets lo saben bien. En 1986, en las Series Mundiales contra los Red Sox, los de Nueva York levantaron un dos a cero en contra, partidos que se jugaron en el Shea Stadium, y lograron el anillo en siete partidos.

Sin embargo, un fantasma se aparece en las pesadillas de los habitantes del barrio de Queens. En función de lo que ocurra en el tercer partido, cabe la posibilidad de que los de Kansas se proclamen campeones la noche de Halloween. Una noche de brujas que puede ser la más feliz en Misuri y en la que los hinchas neoyorquinos recibirían un tremendo susto.

Los Royals han hecho de su feudo un fortín y no quieren volver a ahogarse en la orilla. En la noche del segundo partido, tras la extraordinaria actuación de Cueto, el público entregado le gritaba que le amaba. Cueto, contestando como Han Solo a la Princesa Leia, les dijo: “Lo sé”.