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RUGBY | MUNDIAL

Ayerza: "Argentina podrá ganar un Mundial si sigue esta línea"

Marcos 'el Toro' Ayerza es uno de los pilares izquierdos más destacados del planeta. Logró con Argentina el bronce de 2007 y espera repetir la hazaña.

Marcos Ayerza.
Dan MullanGetty Images

—Ocho años después, vuelve a verse en la tesitura de ser bronce en un Mundial. ¿En qué cambia su situación de la de 2007?

—El vivirlo como protagonista. Entonces jugué dos partidos y ahora tuve más encuentros, con mi carrera más desarrollada y siendo más consciente del momento histórico que puede ser repetir lo de 2007. Estoy muy contento por como este grupo ha encarado este Mundial. Lamentablemente no tuvimos el mejor día ante Australia en la semifinal y nos queda cierto sabor amargo por ello. Pudimos haber ganado si la versión hubiese sido otra, pero salió así y fueron justos vencedores. Tenemos ganas de cerrar el Mundial con un bronce ante Sudáfrica e igualar la hazaña de 2007.

—¿Cree que si hubiesen jugado como en el debut ante Nueva Zelanda ahora serían finalistas?

—¡Esto es un Mundial, son 80 minutos y debes tener tu mejor versión en el día concreto! Con los primeros 20 minutos ante Irlanda o el primer tiempo frente a los All Blacks sería otra cosa... dimos otras caras mejores. Son muchos factores los que influyen en sólo un partido. No fue el mejor día.

—Los Pumas de 2007 eran más mediáticos y quizá los de ahora sean más consistentes como bloque, ¿no?

—Argentina ha pasado por un proceso de cuatro años con el Championship que ha provocado que nuestro rugby crezca. El listón marcado ahora para que un jugador vaya al combinado nacional es diferente, ha habido un crecimiento y a diferencia de 2007 ahora el rugby se juega distinto. Sin desmerecer a aquellos Pumas, que lograron una hazaña histórica. Es esperanzador ver como el juego evoluciona y Argentina no se queda atrás.

—Para muchos no es sorpresa que Argentina haya sido semifinalista tras los últimos años...

—Desde que debutamos en el Championship a la situación actual fuimos a más. Logramos ganar a Australia y a Sudáfrica. La competitividad mostrada por el equipo ante los All Blacks y las otras potencias del Sur reflejan una evolución en nuestro juego. Por eso sería importante poder cerrar el Mundial con un gran partido, logrando el bronce ante Sudáfrica, a la que ya ganamos en Durban. Sería clave para este grupo lograr ese tercer puesto.

—Dijo Meyer que para Sudáfrica esta final de consolación era como "besar a tu hermana". ¿Puede estar la diferencia en la motivación o cree que es una trampa?

—Creo que es un discurso de cara a una prensa sudafricana que venía a Inglaterra a ganar el Mundial y no a pelear por el bronce. Es la desazón del momento y lo que se usa mediáticamente para expresarse. Sudáfrica saldrá a jugar a un nivel altísimo, muchos jugadores se retiran de los Springboks tras el Mundial y querrán cerrar el ciclo con una medalla. Encima aún tienen la sangre en el ojo tras nuestra victoria en su casa durante el Champonship. No van a regalarnos nada y ojalá se dé un buen partido para nosotros.

—¿Cuál es el futuro de los Pumas? ¿Pueden ser finalistas en 2019?

—El balance de este Mundial es que ojalá se consolide la posición del rugby argentino y que con estos estándares podamos seguir creciendo y algún día ser campeones. Se confirma que en los últimos cinco torneos llegamos dos veces a cuartos y otras dos veces a semifinales. Argentina está avanzando y de cara a Japón espero ver a unos Pumas mejorados.

—¿Cuál fue la sorpresa y cual la decepción de este Mundial?

—Lo positivo fue la victoria de Japón a Sudáfrica y la decepción Inglaterra, campeona del mundo con grandes expectativas, anfitriona y que no pasó ni de la fase de grupos.

—Hablemos del Toro Ayerza. ¿Ha tenido la tentación de volver a Argentina y enrolarse en la franquicia para seguir siendo internacional o prefiere quedarse en Inglaterra con los Leicester Tigers?

—Tengo tres años más de contrato con Leicester y los jugaré. Ya veremos si los Pumas me necesitan. No me senté tanto a pensar el futuro inmediato. No tengo intención de retirarme, veré como se van dando las cosas.

—Ahora tiene 32, pero ver a un pilar con 36-37 años en un Mundial no es tan extraño...

—Es cierto. Ya veremos qué sucede.

—Su club, Leicester, ha fichado al ex capitán sudafricano De Villiers y quiere recuperar la hegemonía pasada tras años sin títulos. ¿Cuál es el nuevo reto de Tigers?

—Es un equipo que aspira cada año a salir campeón. Tenemos una Copa de Europa por delante en la que hace años que no pasamos de cuartos de final. Perdí dos finales con Tigers y tengo muchas ganas de volver al club, a la familia y armar una temporada que será larga e intensa con los nuevos fichajes y la gente que vuelve del Mundial.

—¿Hay tanta diferencia entre el rugby del Norte y del Sur como se vio en el Mundial?

—Siempre se habló de las tres potencias del Sur y es lindo escuchar como ahora la prensa habla de las cuatro, con una Argentina que mostró un rugby expansivo y vistoso. No creo que haya tanta diferencia pero en el Sur se pone más el foco en las estrellas y en el Norte en la parte física. Yo creo que es una llamada de atención al rugby para que este deporte siga evolucionando y no se olviden de seguir desarrollando la parte técnica.

—¿Y entre Inglaterra y Francia, donde parece que hay más dinero y últimamente ganan la Champions europea?

—No veo tanta distancia. Además se están equiparando poco a poco los salarios. No siento que los clubes franceses sean más competitivos o fuertes que los ingleses. Ambos países tienen sus virtudes y también sus problemas para seguir creciendo. Francia se está replanteando la cantidad de extranjeros que tiene en sus ligas porque no desarrolla el talento local e Inglaterra se ha puesto más estricto en ese sentido. Pero tiene una gran desazón por no haber pasado la fase de grupos en el Mundial. Hay que buscar un camino y en los Pumas lo estamos encontrando, es lindo comprobarlo y ojalá en los años venideros sea todo incluso mejor.

—¿Sigue la evolución del rugby español, ve a los Leones en el Mundial de 2019?

—Conozco a algunos como Pablo Feijoo, César Sempere... Creo que está creciendo y ojalá las autoridades sigan dándole importancia y apoyándolo para que haya más estructuras y más gente capacitada. Es un deporte en expansión en España y con la ayuda de todos, quizá también de argentinos, dé un paso. No lo veo tan imposible que puedan clasificarse para el Mundial de Japón. Además el equipo de Seven está jugando bien y supongo que el foco actual está en entrar en los Juegos Olímpicos 2016, pero después de eso ¿por qué no soñar con ver a España en un Mundial nuevamente?