¿Quién es el favorito en una NFC Este mutilada?
Cowboys, Eagles, Giants y Redskins. Quién más quién menos se ha visto envuelto en la inercia autodestructiva tan típica de esta división. Nos gusta el drama y en el Este de la Nacional lo tenemos a granel. Bradford, Victor Cruz y… ¡¡Robert Griffin III!!!
En Dallas imploran por el retorno de sus dos hijos pródigos, Tony Romo y Dez Bryant. Aunque a estas alturas de la temporada Greg Hardy y un Sean Lee sano pueden ser las mejores bazas para que los Cowboys se sitúen en una dinámica favorable que les permita por enésima temporada llegar con vida a la recta final de la temporada regular.
En Philadelphia claman al cielo por un milagro, ese milagro que les haga volver a ser el equipo que en la pretemporada desmenuzó a sus rivales con un Sam Bradford que más bien parecía Vassili Záitsev. El Papa Francisco ha obrado muchos milagros, su San Lorenzo fue campeón en América, y Argentina a punto ha estado de ser campeón continental y del mundo. Tras su visita los Eagles consiguieron vencer pero no convencer, y es que a cada semana que pasa más parece una utopía que Bradford responda a las expectativas, pareciendo más Rompetechos que un infalible francotirador de los Urales. Por ahora su único consuelo aparte de tener una victoria es que Nick Foles no está resultando ser la repanocha en los Rams.
En la parte azul de Nueva York sonríen, sí, sonríen porque ven a sus rivales y lo suyo por ahora sólo parecen heridas superficiales. A nadie le extrañaría que los Giants tuviesen a estas alturas un récord de 3-0, al igual que tampoco extrañaría que fuesen 0-3, nadie mejor que ellos para dar oportunidades al rival cuando este último no “quiere” tenerlas. Victor Cruz vuelve tras un año de inactividad, su dupla con Odell Beckham ha estado prácticamente inédita. En defensa jóvenes valores como Uani Unga y Devon Kennard insuflan aire a un conjunto que necesita ‘pass rush’ como el comer.
En D.C. los Redskins parecían el equipo más entero hasta hace unos días, su mutilación fue rápida, antes de que comenzara la temporada, y como sabéis ser rápido y directo hace que el dolor sea un suspiro y no se prolongue, o eso dicen… Al igual que sus acérrimos rivales esperan a Dez Bryant, ellos claman por DeSean Jackson. ¿Pero será Kirk Cousins el que le lance balones? Su actuación ante los Giants despierta dudas, y con Colt McCoy perdiéndose y siendo limitado en los entrenamientos debido a un corte en su pie, la figura de Robert Griffin III vuelve a la paletra, sí, como oís, Robert Griffin puede volver más pronto que tarde a enfundarse la ‘burgundy and gold’. Han encontrado en Matt Jones es el jugador más parecido a Marion Barber que ha pisado la NFC Este desde su marcha, forma una dupla con Alfred Morris que promete emociones fuertes. Las trincheras a ambos lados del balón han estado funcionando de maravilla, además de tener un apoyo aéreo importante en Jordan Reed, el cual de mantenerse sano es clave para el equipo de Gruden.
Resulta complicado tener un favorito entre tanto tullido, pero al final alguno deberá imponerse. No me hagáis caso, creo firmemente que hay potencial de sobras en más de una franquicia como para intentar un asalto al Vince Lombardy, pero a día de hoy están muy lejos de ello. Encarando la semana cuatro los Giants parecen el equipo más entero, falta ver si en Philadelphia Bradford puede responder y agradecer la victoria que Sproles (¡¡monumento en Canton, Ohio, para Darren Sproles ya!!) le proporcionó, o si Robert Griffin III en caso de volver a jugar es capaz de ser el líder que todos desean tras la cura de humildad recibida. Y en Dallas bueno… Esperemos.