El día de la verdad para la SEC West en la NCAA
Auburn y LSU han comenzado dejando dudas, pero éstas serán despejadas en el duelo que les enfrenta esta misma noche.
Desde hace años, la SEC es la conferencia e football americano universitario más temida, odidada, seguida, querida, adorada y discutida. Es, sin duda, la reina e la competición y la que polariza todo lo demás. En un torneo en el que se eligen los cuatro participantes en el playoff, y hasta el año pasado simplemente los dos equipos que jugaban la final, la SEC ha estado en notables ocasiones en el centro del debate porque, ojo, el pueblo pedía que dos de los participantes del playoff fuesen de la conferencia o, más aún, que los dos finalistas lo fueran.
Una locura. Si no fuera porque ocurrió... LSU y Alabama llegaron a jugar la final de la NCAA entre ellos a pesar de estar en la misma conferencia. Pero es que es peor aún: ambos pertenecen a la SEC West, la división que domina desde hace años la conferencia. Así de serios son el Sur con lo suyo, y así de reverenciado está su football en el resto de los Estados Unidos.
Pero a nadie se le escapa que la conferencia, y la división, han tenido un pequeño bajón en los últimos años, a la vez que otras ligas, en concreto la PAC-12, se les han acercado peligrosamente en la conciencia colectiva como competición cercana en nivel.
Es por eso que ha causado sorpresa, pero tampoco escándalo, que Auburn, una de las universidades puntales de la SEC West, haya comenzado el año e manera muy deficiente. Va 2-0 en el casillero de victorias y derrotas, sí, pero la segunda de ellas frente a una muy menor Jacksonville State, en un encuentro que fue demasiado igualado para el abismo de nivel entre unos y otros.
Tampoco LSU es la superpotencia que una vez fue, y aunque en la SEC se les siga vendiendo como una superpotencia, lo cierto es que los rankings no los tienen en el top 10 que, dado el historial reciente del grupo que entrena Les Miles es poco menos que un insulto.
Pues bien, esta noche LSU y Auburn juegan un partido que nos dejará muy claro cual de ellos dos va a transitar por la temporada poco menos que como alma en pena y cual de los dos podrá decir, pecho hinchado, que el mundo entero les había infravalorado y que están tan bien como siempre.
Si a esto sumamos que Alabama, la gran reina de la SEC West, tiene un partidito contra Ole Miss queda claro que de los resultados de hoy se inferirá el futuro de la división y, aún con mayor ruido, el debate sobre su nivel real se intensificará. Hay que recordar que el año pasado Ole Miss ya ganó a Alabama en una de las jornadas más recordadas del año y por siempre en la memoria de los fans del estado de Misissipi que vieron a sus dos universidades principales invictas en la cima de los tops. Casi nada.
Auburn, LSU, Alabama... la SEC West se juega hoy mucho más que un par de resultados. Se juega el saber exactamente donde están y quienes de entre los suyos pelearán por el título cuando lleguen las navidades.