Mayweather: adiós sin pasión para igualar con Marciano

"Es oficial, ya estoy retirado". Floyd Mayweather dijo adiós al boxeo, aunque casi nadie lo crea, con una victoria sin pasión frente a Andre Berto. Por decisión unánime (117-111, 118-110 y 120-108). Invicto en 49 pleitos, igualó el récord de imbatibilidad del mito de los pesados Rocky Marciano. 'Money' acabó el combate y se arrodilló sereno en el centro del ring del MGM de Las Vegas con el puño en alto y echando la vista al cielo. Solo. Con la impresión de que poca gente le echará de menos. "El dinero no me hizo, yo hice el dinero", recordó tras otra puesta en escena en la que nunca quiso entrar en los intercambios. Al púgil más lucrativo de la historia, que acabó su contrato de 300 millones de dólares por seis combates con Showtime (aunque sólo por enfrentarse a Manny Pacquiao ganó ya 200), siempre pareció darle más valor a la caja que la historia. El poco lustre de Berto 'sólo' le reportó 32 millones.

Siendo generosos, Berto pudo ganar dos asaltos a lo largo del combate (4º y 9º) mientras Manny Pacquiao soltaba en las redes sociales una foto suya tocando el piano en su móvil. "Lo que hago cuando estoy aburrido", escribió irónico. Y es que a Mayweather no le hizo falta ni cerrar tanto su guardia como ante el filipino. Es innegable su capacidad para rotar cadera y cuello. Para escapar. Cuando el rival tira el golpe, ya no está. Eso le pasó a Berto, un púgil ahora mismo de clase B, que deja su récord en 30-4 ya con cuatro derrotas en sus seis últimos combates.

El de Grand Rapids retuvo sus títulos mundiales del welter CMB y AMB sin riesgo. En el cuarto asalto una derecha descendente hizo daño a Berto. En el último round, con más presión podía haber noqueado al ex campeón mundial de origen haitiano dejando otro sabor de boca. Pero ni aún así se expuso a verse comprometido por una mano suelta: prefirió ponerse a bailar sobre el cuadrilátero. Ligero e irreverente. Entre abucheos y también aplausos. Una última demostración de la agilidad de pies que ha sostenido su carrera.

"Uno debe saber cuándo colgar los guantes. Casi llego a los 40 (tiene 38 años) y ya rompí récords", resumió Mayweather, que ya se retiró en 2008 para volver. En la primavera del año próximo, el MGM inaugura un Arena que debe ser la nueva Meca del boxeo. A Floyd, libre para negociar, le llegarán propuestas mareantes para abrirlo en una revancha contra Pacquiao, contra el ganador del Cotto-Canelo (a los dos les ganó ya) o frente al británico Amir Khan. De lo fuerte que sea el tintineo puede depender que Money escuche el sonido. Ganó a Berto sin exponerse. Blindado por su capacidad de esquiva, por su cintura prodigiosa. En las cuerdas, donde otros ven una trampa, él tiene un aliado. Berto sólo conectó un 17% de golpes (83/495) por el 57% (232/410) del campeón. Con un combate más podría llegar a las 50 victorias y superar a 'La Roca' Marciano. El Rey Midas del boxeo, que no el mejor de la historia (The Best Ever) como se autoproclama, dijo adiós. Está por vez si no fue un hasta luego.