Caso Deflategate: El juez anula la sanción a Tom Brady
El juez ha determinado que la sanción de cuatro partidos a Tom Brady queda anulada y el jugador de Patriots podrá empezar el añoPatriots-Eagles: Super Bowl LII en vivo
El juez del distrito, Richard Berman, ha estimado que las consecuencias más directas del caso Deflategate, es decir, la sanción de cuatro partidos a Tom Brady queda anulada con lo que podría arrancar la campaña con los Patriots, circunstancia que ocurrirá el próximo 10 de septiembre en casa, en el Gillette Stadium, contra los Pittsburgh Steelers.
El escrito que el juez federal ha remitido a las partes afirma que el comisionado Roger Goodell se extralimitó en sus funciones a la hora de sancionar al quarterback del equipo campeón de la pasada Super Bowl por su presunto implicación, circunstancia que Brady siempre negó en los actos derivados del partido de la Final de Conferencia de la AFC ante los Indianapolis Colts, choque en el que los Patriots se impusieron por 45-7.
La anulación completa de los cuatro partidos a Brady ha supuesto una relativa sorpresa a los distintos expertos legales ya que consideraban que la actitud beligerante del juez Berman con la NFL no era otra cosa sino una táctica para ejercer presión y que ambas partes terminaran llegando a un acuerdo.
Sin embargo, dicha decisión del juez viene después de varias semanas en las que ambas partes han sido incapaces de llegar a un acuerdo tras la confirmación de esos cuatro partidos que consideró el comisionado Roger Goodell después de la apelación que interpuso Tom Brady.
Curiosamente, fue la propia NFL quien llevó el caso a la corte federal en Manhattan del juez Berman nada más conocerse que el comisionado Goodell confirmaba la sanción al jugador de los Patriots. La propia liga se mostró muy crítica con la actitud de Brady, que destruyó su propio teléfono móvil y los casi 10.000 mensajes que había en su interior para que no pudiese formar parte de la propia investigación del Deflategate.
El propio Goodell fue más allá que lo que se decía en el informe de Ted Wells, en el que se informaba que era "más probable que no" que dos empleados de los Patriots desinflaran ciertos balones para que se ajustaran a los parámetros de Brady, figura a lo que no se citó en ningún momento.
El comisionado afirmó que "Brady sabía, conocía, aceptó, consintió y proporcionó recompensas" para asegurarse que los balones estuvieran como le gusta al quarterback de New England.
Durante las distintas sesiones, el juez cuestionó las evidencias que aportaba la NFL y también la dureza de la sanción en lugar de recurrir a otro tipo de disciplina. Asimismo, avisó a la propia liga de que tenía la facultad de anular la sanción si concluía que la NFL no había actuado de buena fe al rechazar la presencia como testigo de Jeff Pash, vicepresidente ejecutivo de la competición a pesar de haber participado en la propia investigación del caso Deflategate.
Al mismo tiempo, la corte federal estableció que Brady no tenía presente que podría recibir una sanción de cuatro encuentros por ser consciente del desinflado de balones por otros individuos y que no estaba informado que podía ser sancionado con la misma dureza que aquellos que hubiesen recurrido al uso de sustancias dopantes.
Hay que destacar que puede no ser el fin del Deflategate en sede judicial ya que la NFL puede presentar un recurso ante el dictamen del juez aunque la sanción económica al equipo y la perdida de rondas del draft permanece vigente, siendo hasta la fecha la más grave de toda la historia de la NFL a un club.
La conclusión (temporal) del caso supone un revés más en el expediente sancionador del comisionado Roger Goodell. El caso Brady se suma a los de Greg Hardy (10 partidos de sanción reducidos a cuatro), Adrian Peterson (indefinido a seis) o Ray Rice (indefinido a diez) una vez que han sido revisados por una autoridad externa.