"Me voy triste, con mal sabor de boca. Me sabe a poco, ahora puedo decir que creía firmemente que estaba para saltar más", confesó Ruth Beitia en la zona mixta del National Stadium de Pekín, después de firmar el quinto puesto en la final de salto de altura. Beitia (bronce en el Mundial de Moscú , con 1.97) se convierte así en la segunda finalista española de este Campeonato, tras el marchador Miguel Ángel López, oro en 20 kilómetros .
En el momento en que Beitia se explicaba con los periodistas españoles (a cada uno de los cuales propinó un beso de despedida), las rusas Maria Kuchina y Anna Chicherova (oro y bronce) y la croata Blanka Vlasic (plata), daban la vuelta triuinfal a la pista del 'Nido de Pájaro', después de haberse igualado para subir al podio en un mejor salto de 2.01. Los números de intentos válidos y nulos dieron ese orden final: Kuchina, Vlasic, Chicherova. "Hay dos con más de 30 años", observaba Beitia con melancolía. Eran Vlasic (31, que obtiene su mejor marca desde 2011) y Chicherova (33).
"No sé bien qué ha fallado... bueno, sí lo sé, que no he saltado dos metros" , se justificaba Beitia antes de agregar: "Ahora me duele y recuerdo el mal tercer salto sobre 2.01, pero sé que dentro de muy poco empezaré a ver lo positivo, que he saltado 1.99, a un centímetro de mi marca del año, y que tenemos que terminar muy bien la Diamond League. Cada día que pasa es un día más... y un día menos. Voy a seguir esperando lo mejor para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, aunque quizá esta sí haya sido mi última oportunidad en unos Mundiales al aire libre . En unos Europeos supongo que vendrán más oportunidades". Y, algo escasamente frecuente, Ruth Beitia, emocionada, dedicó un beso de despedida y una palabras de agradecimiento a cada uno de los enviados españoles presentes en la zona mixta.