El estado de la NFC Sur tras un draft muy importante para ellos

El draft se vivió con un poco más de intensidad en Charlotte, Atlanta, Nueva Orleans y Tampa Bay, ciudades anfitrionas de la NFC Sur. Simplemente había mucho en juego para la que fue la peor división del 2014. Tampa, que tenía la primera selección, escogía su futuro a largo plazo. Atlanta, con la octava selección, iba mostrar al mundo las líneas de actuación del nuevo modelo Quinn. Carolina buscaba apuntalar su defensa, buscando esa pieza que levantase el nivel colectivo pasar de un equipo de playoff por rebote a ser animador de la post temporada. Y Nueva Orleans, ya hablaremos de Nueva Orleans.

Vamos a hacer un pequeño resumen de lo que fue el draft para la NFC Sur y poner una nota a los cuatro equipos. Hay que añadir que no se va a comentar sobre todas las selecciones, solo sobre las que a priori tendrán más impacto en el equipo. Hay que recordar que por lo menos la mitad de los jugadores escogidos en el draft fracasan (y terminan o en la liga canadiense o Cleveland).

Carolina Panthers: Nota 6.5/10

(aunque puede ser un 8/10 dependiendo de la progresión de Thompson y Funchess)

Carolina aprovechó su condición de favorito a campeón de la NFC Sur y apostó por Shaq Thompson y Devin Funchess. Thompson siempre fue considerado un buen jugador, pero su mal combine lo devaluó. Funchess es un receptor rápido al que Newton va a poder acudir si este mejora su coordinación a la hora de recibir la pelota. Daryl Williams (cuarta ronda) es una piedra más para la linea ofensiva y podría convertirse en un titular en el equipo. Cameron Artis-Payne es un RB explosivo que parece hará buena pareja con su tocayo Cam, quien fue a Auburn como él.

Hay que señalar dos cosas sobre los Panthers. La primera es que la selección de Thompson va a complementar de maravillas la combinación ya existente de Kuechly y Davis, creando un grupo de linebackers a tener en cuenta. La segunda es que tienen tiempo para adaptar a los nuevos. En teoría los Panthers son el único equipo “hecho” de la divisón y no tendrán problemas para clasificar a los playoffs. Esto los llevaría a centrarse en ganar partidos pero sobre todo en mantener a sus jugadores sanos, algo que ya probo ser un reto la temporada pasada y les salió caro.

Atlanta Falcons: Nota 9.5/10

Atlanta ya tenía varios jugadores muy buenos en ataque; y ahora del draft han sacado ese pass rusher que tanta necesitaban seleccionando a Vic Beasley. Esta era una selección muy fácil: es un excelente jugador rápido y agresivo que aporta todo lo que buscaban y que para redondear creció siendo aficionado a los Falcons (es de Georgia). Los Falcons apostaron por Jalen Collins en la segunda ronda. Él es un excelente CB y cayo en el draft hasta estar disponible en la segunda ronda por sus problemas fuera del campo. Esta apuesta vale la pena y los Falcons lo saben. Collins junto a Trufant y Alford van a crear un buen trio atrás que desde luego mejorará al del año pasado. Trevin Coleman es un excelente jugador al que Atlanta robó demasiado adelante en el draft. Si llega a ser tan productivo como lo fue en college, puede empujar la calidad de Atlanta en ataque terrestre hacia una de la mejores.

En síntesis, los Falcons han mejorado, y mucho. Los picks de Altanta componen fácilmente la mejor “clase” del draft. Por ahora el golpe de efecto que debía de ser Quinn parece estar surtiendo efecto y la afición en Altanta está entusiasmada (o quizás solo han dejado el encendido el ruido ambiente en el Georgia Dome). Esta mejora de los Falcons, sobre todo en defensa, debería de tener a Matt Ryan y a Julio Jones dando saltos de alegría. Quizás este año no sea necesario meter mil puntos para tener una posibilidad de ganar el partido.

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Tampa Bay Buccaneers: 7/10

¡Poned el cartel de “No Hay Billetes” en el Raymond James Stadium! El héroe del norte de la Florida se queda en casa para jugar con los Bucs. Pasó lo que se esperaba, Jameis Winston va a intentar capitanear el barco bucanero un poco más lejos de la mediocridad. Aparte de Winston, los Bucs seleccionaron a un buen jugador como Donovan Smith y a una sorpresa de divisón III como es Ali Marpet. Los dos, aparte de ser seleccionados en la segunda ronda, harán un gran dúo jugando juntos; eso si necesitan ser curtidos en la NFL.

Pero seamos sinceros, le han dado los mandos del barco a un novato con problemas fuera del campo y que aún tiene todo por demostrar. A pesar de la euforia de los aficionados demostrada con la compra de billetes y camisetas, Tampa aún le queda mucho crecer y aún quedan largos meses para curtir a estas promesas para que sean jugadores nivel NFL, y este crecimiento va a doler como una visita al dentista. No esperemos mucho de Tampa esta temporada, pero el barco parece que gira lentamente hacia la dirección correcta.

New Orleans Saints: 7/10

¡Defensa! ¡Defensa ¡Defensa! La prioridad era clara en Bourbon Street. Es por esto que Loomis y Payton no perdieron tiempo y fueron a por ella. Andrus Peat, Stephone Anthony y Hau’oli Kikaha son un ejemplo de la fiebre de la defensa en NOLA. Peat junto a Unger deberían crear un gran dúo en la línea de ataque que debería defender mucho mejor a Brees del infierno que fue la temporada pasada, o al menos darle más tiempo para hacer jugada. Anthony y Kikaha van a robustecer la antes anímica defensa de los Saints. El DB P.J. Williams escogido en tercera rondo es una gran selección tan avanzado el draft e intriga como lo usará Rob Ryan en su esquema, ya que el backfield lo han cargado de jugadores nuevos.

Pero volviendo a la realidad, a pesar de que los Saints han mejorado en la línea defensiva, sigue teniendo algún poro que rellenar en defensa. Parece que la temporada de los Saints dependerá una vez más de lo que produzca Drew Brees. La temporada pasada la línea ofensiva, más que fallar en protegerle contra sacks, falló en darle tiempo para que las jugadas se desarrollen enteras y tirar a tiempo. Puede que Peat y Unger mejoren este aspecto pero aun así Brees la tendrá difícil ya que tendrá que hacer con menos herramientas que la temporada anterior tras las salidas de Graham y Stills. La temporada parece será larga en Nueva Orleans, pero la fiesta y los ánimos nunca decaerán. ¡Laisser les bons temps rouler!