Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

Deportes de hielo| Frank González

“Nuestro principal problema es la falta de instalaciones aquí”

Frank González ganó a Teresa Samaranch la presidencia de la Federación. Jugó al hockey hielo en Toronto y en España y pertenece al Ejecutivo de la Federación Internacional.

“Nuestro principal problema es la falta de instalaciones aquí”

—Usted creció sobre el hielo, ¿no?

—Sí. Pasé doce años en Canadá y allí sólo puedes jugar a hockey o jugar a hockey. Mi caso es como el de otros españoles que se forman fuera. Más en Suiza. Allí por ejemplo está Rafa Díaz, que es de padres gallegos y ha llegado a la NHL. Ahora, mi hijo Pol estudia en Montreal, juega allí y compite con España en la Universiada de Granada. También contamos con Carlos Quevedo, enrolado en Pittsburg, en la Universidad de Robert Morris. Los patinadores tienen sus bases en Montreal y Toronto…. Eso demuestra que se nos pueden dar bien los deportes de hielo siempre y cuando tengamos las instalaciones, y no sólo el hielo para las bebidas.

—¿Por qué disputó la presidencia a Teresa Samaranch?

—Yo era vicepresidente, pero transcurrido el tiempo creo que debía haber un cambio. Pegar un acelerón. Ir más rápido. Espero que Javier Fernández nos confirme todo lo que ha apuntado en los próximos Juegos y tener también a gente en curling, short-track, hockey…

—¿Su principal problema son las instalaciones?

—Claro. En Madrid estamos intentando que se rentabilicen las cinco pistas que existen para desarrollar todos los deportes, y dedicar alguna a tecnificación. Ahora tenemos 15 en España. Con la de la Universiada de Granada, que se mantendrá, 16. Se dan situaciones como que los chicos de curling viajen mucho a Suiza, Venecia o Edimburgo a entrenar, porque sale más barato gracias a las compañías low-cost. Aquí las pistas son privadas y prefieren tener a 60 personas patinando que a cuatro ‘tirando piedras’, que dicen ellos. En alguna nos han pedido 300 euros por una hora.

—La que se utilizó en el Grand Prix de patinaje de Barcelona ha sido comprada por el Ayuntamiento…

—Se va a colocar en el CAR de San Cugat. Ahora Barcelona sólo tiene una pista, y es privada. Quiere aspirar a los Juegos de Invierno de 2026 y nosotros ya estamos solicitando competiciones internacionales. Hay predisposición. Y es un sueño.

—¿Cómo les ha influido el éxito de Javier Fernández?

—¡Se nota un montón su tirón! En España patinaban muchísimo más las chicas… y ahora ya hay más chicos.

—¿Van a intentar traerse a Javi aquí?

—Él tiene en Toronto un buen entrenador (Brian Orser)… pero estoy seguro de que cuando gane unos Juegos, será el primero en volver a Madrid a crear su propia escuela.

—¿El patinaje es la punta de lanza, pero qué otra especialidad le gustaría potenciar?

—El short-track es espectacular, el hockey puede mejorar, y el curling, donde tenemos unos subcampeones de Europa júnior. La ventaja es que son deportes jóvenes, y a poco que se hagan las cosas bien creceremos. En velocidad, Íñigo Vidondo tiene mucho mérito, pues se ha ido a Alemania a entrenarse y acaba de disputar su primera Copa del Mundo en 1.500.

—¿Es partidario de un plan ADO de deportes de invierno?

—Primero necesitamos deportistas con buenos resultados, que son los que traen los patrocinadores, y no a la inversa. Ahora, los padres son los principales sponsors. La Federación tiene un presupuesto de 700.000 euros... comparado con los dos millones del esquí.

—¿Y los técnicos? ¿Los formamos o los traemos de fuera?

—Ambas cosas. La selección de hockey la llevan dos finlandeses, pero la femenina dos españoles. En el curling, un suizo y una sueca… Necesitamos aprender de ellos.

—¿A los patinadores les cuesta dinero competir?

—Parte del dinero lo da el CSD, otra los patrocinadores y algo la Federación. No queremos que sufran preparándose.