El Naturhouse La Rioja derrota al Meshkov Brest por 39-31

El Naturhouse La Rioja se impuso por 39-31 al Meshkov Brest de Bielorrusia en el primer partido de la Liga de Campeones, en el que ha sido siempre superior a su rival y al final ha obtenido una renta de ocho goles que puede ser importante en la clasificación final.

El equipo de Logroño que llegaba tras ofrecer mala imagen en su último encuentro de Liga aprovechó que por primera vez en la temporada contaba con toda su plantilla, lo que le ha permitió tener un ritmo de juego alto y la intensidad suficiente para decantar el partido.

El Naturhouse realizó una gran primera mitad y, sobre todo, fue superior tácticamente ya que dosificó a sus jugadores para imprimir un ritmo de juego que el equipo bielorruso no logró seguir.

El Brest ya tardó un poco más que el Naturhouse en entrar en el partido y se vio detrás en el marcador pronto, aunque su contraataque le permitió empatar en el minuto diez (a cinco goles) después de dos errores de los riojanos.

Fue en ese momento cuando el Naturhouse cambió de marcha y su rival no fue capaz de reaccionar.

La entrada en el campo de Juanín García, Albert Rocas, Petrus, que esta misma noche había llegado de Brasil, y Aguinagalde, tras mes y medio de lesión, imprimió intensidad a los riojanos, con contundencia defensiva y velocidad retomaron la ventaja de tres goles (9-6 y 11-8).

Pero querían más, y liderados por Stenmalm (sus seis goles fueron en la primera mitad) y Juanín García (tres en apenas diez minutos) pasaron a dominar con claridad a su rival, con ventajas de cinco y seis goles, como la que llegaron al descanso (20-14).

El Meshkov Brest se había mostrado en todo el primer tiempo como un equipo "plano" en ataque, con un solo sistema: penetrar por el centro y tratar de aprovechar la corpulencia en esa zona, donde Stojkovic y Shylovich se comportaron como auténticos "martillos".

Eso no fue suficiente para los bielorrusos en el primer tiempo, pero en el segundo, esos dos mismos jugadores se bastaron para acercar al Brest hasta el 24-20 en apenas siete minutos.

El Naturhouse pasó por un mal momento, como le había ocurrido en el primer tiempo; y de nuevo volvió a reaccionar, con velocidad y un juego mucho más eléctrico que el de su rival.

En el último cuarto de hora el conjunto bielorruso trató de agotar todas sus opciones, mejoró su presión defensiva y empezó a inquietar a los riojanos, sobre todo cuando a once minutos del final se acercaron a cuatro goles (33-29).

Pero su esfuerzo no dio para más. El Naturhouse volvió a poner más ritmo e intensidad defensiva y recuperó el control del choque, con lo que aumentó de nuevo su ventaja, consciente de que puede ser muy importante para la clasificación final, dado que estos dos equipos son rivales directos para pasar a la segunda fase.