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Enrique Gómez Bastida

"Los éxitos de los deportistas españoles deben ser creíbles"

El director de la Agencia Española de Protección de la Salud en el Deporte cree que el pasaporte biológico podría llegar al fútbol.

Enrique Gómez Bastida, en un encuentro con la prensa de Barcelona.
Rodolfo Molina

Enrique Gómez Bastida es director de la Agencia Española de Protección de la Salud en el Deporte (la agencia antidopaje) desde hace poco más de tres meses y en éstos ha tratado, primero de todo, de comunicar bien su labor a todos los colectivos con los que se ve involucrado en el día a día. También los periodistas, con los que ha departido en Barcelona sobre muchos de los temas que afectan tanto a la Agencia en particular como al deporte en general. Su primer objetivo, recuperar la credibilidad del deporte español.

Y es que a este comandante de la Guardia Civil en excedencia, como a todo su equipo de trabajo, le preocupa tanto la competición sana de sus deportistas como la imagen que se transmite en el exterior: "Nuestros deportistas no solo han de ganar de forma limpia sino que sus victorias han de ser también creíbles". Para ello, el trabajo de la administración, que Bastida defendió a capa y espada, debe ser impecable. Él mismo fue uno de los responsables de la investigación de la Operación Puerto y aseguró, en contra de la percepción pública, que las investigaciones no quedaron en la nada: "De los tres principales acusados a uno se le condenó, otro desgraciadamente se suicidó y el tercero padecía Alzheimer".

De hecho el director de la Agencia puso como ejemplo los pasos tanto legislativos como técnicos (laboratorios, controles...) que está dando España en la materia, en contraposición a Brasil, país que acogerá tanto el próximo Mundial como los Juegos Olímpicos. Bastida comentó que Brasil "ni tiene una ley orgánica contra el dopaje ni la va a tener a tiempo" mientras que a Madrid se le exigió solo para ser ciudad candidata.

Pero si hay un deporte relevante en España, tanto por interés como por número de fichas federativas, ese es sin duda el fútbol. Bastida reconoció que es donde hay más controles, disipó cualquier atisbo de duda sobre la fiabilidad y secretismo de los mismos, y aseguró que trabajan codo a codo con las agencias internacionales para seguir avanzando en la prevención y el control del dopaje. El fútbol no es, de hecho, uno de los deportes con más factor de riesgo (sí lo es por ejemplo la halterofília) pero no por ello está menos vigilado: "El pasaporte biológico es algo que puede llegar al fútbol", comentó.

Pero más que del pasado, a Gómez Bastida le interesa el futuro. Por eso está en Barcelona, para reunirse con diferentes colectivos (como el Centro de Alto Rendimiento) para explicar a los futuros deportistas de élite los riesgos y las consecuencias que acarrea el dopaje. La prevención, tanto en el deporte profesional como el amateur, es uno de los puntos clave de la agencia.