Carpena: "Mengual es un icono, su posible vuelta nos agrada"

Lo más inmediato: ¿qué opina el presidente del posible regreso de Gemma Mengual?

—Si eso finalmente es así, nos agrada porque demuestra su implicación con el equipo. Se siente tan integrada que se plantea volver. Gemma es un icono de nuestro deporte y su experiencia ayuda a la nueva generación que tira ahora del carro.

—Ona Carbonell respondió a esa herencia con siete medallas en el último Mundial.

—El gran éxito de la sincro se demuestra con que se ha mantenido en el primer nivel con los cambios de solistas. Gemma la catapultó; Andrea Fuentes la defendió con esplendor, y Ona ha demostrado que puede incluso superar conquistas anteriores.

—No era fácil tras la turbulenta transición del equipo de sincro tras el caso de Anna Tarrés.

—El equipo salió reforzado tras una complicada transición, hay que reconocer que desde el entorno no se lo pusimos sencillo. Han demostrado que son ellas las que logran los resultados. Las siete medallas fueron una liberación para este renovado grupo, que camina firme a Río.

—Toda la natación dio ese salto en los Mundiales, es usted el presidente de moda.

—No. Soy el presidente de una Federación que tiene unos extraordinarios deportistas, que se mejoran cada año y en este 2013 han dado un paso más.

—Mireia Belmonte se consolida como estrella mundial.

—Sin duda. Un punto de inflexión fue el Mundial de corta de Dubai 2010, con excelentes resultados. De los siete nadadores, seis entraron en finales. Mireia lo refrendó después.

—Y ahora se ha unido Melani Costa a un nivel parecido.

—Hay que darle un diez. Después de los dos novenos puestos de los Juegos, donde se quedó sin finales y sin mejores becas, no tiró la toalla. Que ella y Mireia, dos españolas, vayan a disputar por primera vez un Europa-USA, es excepcional. Y, además, por detrás viene también un grupo muy interesante.

—¿Se llevan tan mal...?

—Melani ya explicó el otro día que se malinterpretaron unas declaraciones suyas. La relación entre ambas es buena.

—Las guerreras del waterpolo también dieron su salto: de la plata olímpica al oro mundial.

—Las guerreras, sí... Porque fueron las primeras que se llamaron así, aunque luego nos lo hayan copiado las de balonmano. Nuestras guerreras han dado el salto definitivo.

—¿Cuál es su secreto?

—Es un grupo unido, cada una sabe su rol y se apoyan. El seleccionador, Miki Oca, ha logrado esa cohesión entre las veteranas y las jóvenes.

—¿Y por qué no tenemos también guerreros?

—Las chicas han aumentado tanto el nivel, que un quinto puesto mundial o un sexto olímpico ya nos sabe a poco. En waterpolo nos falta ese paso para acceder a las medallas y estamos pensando en alguna medida que provoque esa reactivación. En natación también estamos trabajando y ya vienen algunos chicos por detrás.

—Y en saltos, ¿qué hacemos? ¿Fichamos a Falete?

—Bueno, el cariz de ese tipo de programas impide valorarlos desde un punto deportivo...

—Era una broma... Tenemos a Javier Illana.

—Sí, que hizo sexto en tres metros en el Mundial, el mejor resultado de siempre. El problema de los saltos es que necesita unas instalaciones muy particulares y no tenemos muchas.

—El CSD anunció que creará una sección de deporte femenino, ¿qué le parece la idea?

—Pues por mí, casi mejor prefiero que la hagan masculina...