¿Cómo le sienta su medalla de plata en el Mundial y sus éxitos en las Copas del Mundo en plenas vacaciones? Le doy más valor y me doy cuenta de todo lo que logré. La clave fue quedarme a un puesto de las dos finales en Londres. No me podía volver a pasar y me puse a entrenar duro y a mejorar.¿En qué se basó esa mejora y cuánto tiempo le dedicó a la natación el último año? Analicé con el biomecánico del CAR los fallos que tenía. Debía mejorar los virajes y ser más fuerte. Me puse a ello, a trabajar en el gimnasio y a mejorar la técnica en los giros. Fueron de ocho a nueve horas al día, comenzando entre las 6:00 y las 7:00, y nadando entre 70 y 75 kilómetros a la semana.El éxito requiere ese sacrificio. ¿Cómo valora el momento de la natación femenina española? Fue un éxito, pero esperemos que aún vengan épocas mejores. Nadamos en nuestras mejores marcas y logramos muchas finales.¿Cree que la obtención de los Juegos para Madrid, en 2020, es clave? Tiene que ser nuestro punto de referencia. Si nos dan los Juegos, se salvarán muchos clubes, y eso hará que se salven deportistas. Para nosotros son importantes. Ahora mismo estamos bajo mínimos. Sí: necesitamos los Juegos Olímpicos de Madrid 2020.¿Notó la reducción este año? ¡Suerte que el Mundial era en Barcelona! Hicimos menos concentraciones y prácticamente no salimos a competir fuera. Recientemente, se pagó de su bolsillo su participación en la Copa del Mundo, ¿no? Sí, fui con Mireia Belmonte. Hace tres meses que lo comencé a gestionar. La Federación no puede hacer más. La organización me pagó la estancia en Berlín, pero el resto corrió de mi bolsillo. Competimos muy bien. Son torneos en los que hay buenos premios, entre 500 y 1.500 euros si haces podio, más los récords. La húngara Hosszu ganó 50.000 euros.¿Qué retos se pone ahora? No pienso en Río, sino en lo más cercano que tengo; de lo contrario me agobio.Pero ahora no querrá bajar el nivel... No, pero en un año pueden suceder muchas cosas. Dependen de los nuevos talentos y de la edad. La campeona olímpica del 200 libre no se clasificó para el Mundial y la de 400, Camile Muffat, fue séptima. Son las mejores, pero en un año...La que no tiene pinta de bajar el nivel es Ledecky... Es insuperable. Es la estrella de la natación mundial junto a Missy Franklin. No se les ve presionadas o nerviosas.¿Qué le puede aportar Mireia Belmonte a los nuevos nadadores? Los jóvenes buscan un referente y si lo tienen en casa, pues mucho mejor.