Talant Dujshebaev ya denunció favores al Barcelona y al Kiel

Talant Dujshebaev, técnico del Atlético de Madrid, se mordió el sábado la lengua para no hablar del arbitraje de los alemanes Geipel y Helbig en el partido de la Champions frente al Barça, quizá porque el dato estadístico de Saric (19 paradas) era también lo suficientemente contundente como para dar otra explicación a la derrota. Pero a pesar de no hacerlo público, en la plantilla sí existe, según supo AS, "malestar y resignación por unas actuaciones arbitrales que se repiten a menudo".

Dujshebaev no habló esta vez contra los árbitros, pero sí lo ha hecho en otras ocasiones. Y curiosamente el Barça y el Kiel alemán, las dos potencias europeas, siempre aparecen como protagonistas.

No hace falta irse lejos. Esta misma campaña hay dos precedentes con el Barça. Tras caer en septiembre en la Supercopa (34-31): "No quiero hablar para no decir ninguna barbaridad, pero no sabéis lo que me cuesta contenerme. No quiero que me llamen llorón, porque luego parece que soy la persona que más daño hace al balonmano. Si queréis me echáis del país, pero ya estoy harto". Y en diciembre, tras perder la final de la Copa Asobal (32-24): "Como soy hipócrita, felicito al Barça. Tengo muchas ganas de decir lo que pienso, pero no puedo. El circo aquí ya está montado. Todos sabemos dónde está el poder del balonmano español".

Este "poder" que Dujshebaev asigna al Barça en España, lo extrapola también en Europa al Kiel. El año pasado, tras perder la final de la Champions (26-21), Talant se despachó así: "No es justo lo que nos han hecho tres años seguidos. Es una vergüenza que se hable de juego limpio y pase esto. Todo estaba preparado para un triunfo alemán y nosotros éramos los convidados". Dos años antes, frente al mismo rival en semifinales (29-27), entonces con el Ciudad Real, ya se quejó: "En caliente puedo decir muchas cosas, pero me arrepentiría".

No son pataletas exclusivas de Talant. También el sábado, tras el cruce del Veszprem húngaro con el Kiel, Laszlo Nagy escribió en Twitter: "Después de dos partidos contra el Kiel no hemos merecido quedar eliminados. Indignado del arbitraje en los dos partidos. Demasiado respeto EHF...". Desde hace tres años, la Final Four se juega en Colonia (Alemania).