Roldán: “Si Carolina tenía un lastre mental, lo ha liberado”

Seis días después de su victoria en el descenso de Meribel, una ‘nueva’ Carolina Ruiz reaparece este viernes en la Copa del Mundo de esquí alpino. “Cuando el sábado llegó el resultado, dijimos: ‘¡Por fin!’. Ha logrado franquear una barrera y si tenía ese lastre mental, ya lo ha liberado”, apunta Eduardo Roldán, el presidente de la Real Federación de Deportes de Invierno (RFEDI).

"Carolina estaba subiendo. Ya competía en un nivel alto, entre los puestos 15 y 20, pero le faltaba dar el salto entre las diez primeras”, explica Roldán. “Se habían visto síntomas: empezó la temporada con un 16º en un gigante, que no es su disciplina, y también había hecho cuarta en un supergigante (Cortina d’Ampezzo). Por fin le ha llegado el resultado, aunque la victoria no la esperábamos”.

Intercambio. El presidente aprovechó para matizar dos cuestiones sobre Carolina “que quizá hayan creado confusión”. Por un lado: “Hay un tic, no sé por qué, de hablar de la esquiadora de origen chileno, cuando ella es española, llegó aquí con días”. Y por otro: “Tenemos un acuerdo con el equipo francés para que se entrene con ellos, y se benefician las dos partes. Es un intercambio habitual para optimizar los recursos. Un ejemplo: los descensos son largos y requieren de más gente en el recorrido. Además, alquilar una pista de entrenamiento cuesta 1.000 euros al día”.

Carolina es el cuarto español con triunfos en la Copa del Mundo, tras Paco Fernández Ochoa (una), su hermana Blanca (cuatro) y María José Rienda (seis). “No se pueden comparar, cada uno fue grande en lo suyo. Paco lo hizo en una época difícil; Blanca era completa, combinaba más disciplinas; Rienda fue la mejor del momento en gigante, y Carolina es única: ningún español triunfó antes en pruebas de velocidad”.

Sochi 2014. A la granadina le ha llegado el éxito a los 31 años: “Por edad aún puede dar su máximo en Sochi”. Los Juegos se celebran dentro de un año y Carolina será la baza española en la nieve, “junto a Queralt Castellet en halfpipe”. Nacho Oruezabal, director técnico de la RFEDI, añade otros dos nombres: Lucas Eguibar (boardercross) y Laura Orgué (esquí de fondo). “Sí, pero en otro escalón”, asiente Roldán.

Junto a ellos, el patinador Javier Fernández será otra opción, en este caso dependiente de Deportes de Hielo: “Juan Antonio Samaranch tuvo la idea de separar las dos federaciones y a mí siempre me pareció conveniente, porque así el hielo tiene su propia personalidad, su estructura y sus aspiraciones”.

Al hilo, Roldán propone otra separación para dar “autonomía” a los deportes invernales, una petición ya trasladada al CSD: “Se trata de tener más identidad a través de las subvenciones y de un ADO propio. Dos federaciones sostenemos los Juegos de Invierno, mientras que hay otras 28 para los de Verano. Sus problemas no tienen nada que ver con los nuestros, a ellas les da igual si en 2014 hay que competir en Sochi o no. Además, al estar todas mezcladas surgen los recelos sobre si a ésta le han dado más o menos dinero que a mí”.