Más deporte | Natación sincronizada
"Fuera del agua, gorda"
Quince nadadoras denuncian malos modos de Anna Tarrés
Quince nadadoras, integrantes del equipo español de sincronizada en algún periodo de los últimos 18 años, denunciaron ayer en una carta los supuestos malos tratos de Anna Tarrés cuando ejercía de entrenadora. En el escrito, que enviaron a La Sexta, explican que la seleccionadora "no ha tenido límites" y que "el fin siempre ha justificado los medios". Por eso mismo, consideran que "el deporte español no debe admitir y sentir orgullo de medallas conseguidas a cualquier precio".
Las firmantes, cuyo nombre más mediático es el de Paola Tirados, excompañera de dúo de Gemma Mengual hasta Pekín 2008 y que decidió abandonar en 2009 el equipo por fuertes discrepancias con Tarrés, salen ahora a la luz porque "siempre nos hicieron creer que Anna era una persona inamovible, implacable, que siempre tenía poder". La carta es dura y acusadora. Califican a Tarrés de "dictadora" que "optó por sembrar el pánico" y que "sólo se rodea de personas sumisas".
De hecho, también comentan que ninguna nadadora ha salido públicamente en su defensa una vez se conoció la noticia. "Los silencios o las frases esquivas quizás hablan más de lo que muchos piensan".
Al margen de las argumentaciones, en el escrito también se relatan una serie de experiencias personales y de supuestas frases de mal trato psicológico (véanse en la parte inferior de la noticia). Algunas a menores, concretamente a una de 14 años a la que recrimina su promiscuidad sexual. Incluso otra de las nadadoras, que no se identifica, dice que cayó en la bulimia. Entre las firmantes hay chicas de todas las procedencias: Sevilla, Valladolid, Tenerife, Barcelona...
Este grupo señala a favor de Tarrés los méritos deportivos, innegables y que han sacado este deporte del ostracismo, pero critican sus métodos. Hoy, a las 13:00, en la presentación del nuevo equipo técnico, comparecerá el presidente de la RFEN, Fernando Carpena, y algunas nadadoras del actual equipo. Tarrés ya explicó en su día a AS que hay nadadoras "envidiosas" que interpusieron los intereses personales a los colectivos.