Dinamarca sigue siendo la bestia negra de España
La Selección masculina española de balonmano pierde frente a Dinamarca (24-23) por un tanto marcado por Knudsen a tres segundos del final. Gran partido de Mikkel Hansen.

España cayó ante Dinamarca (23-24) en su segundo encuentro de los Juegos de Londres, un partido de grupos con una tensión propia de una final olímpica. Los de Valero Rivera, que realizaron un gran partido ante la campeona de Europa, vieron como un gol de Knudsen a falta de cuatro segundos daba la victoria a Dinamarca, además de continuar su racha negativa con el equipo nórdico.
España comenzó bien, con la lección aprendida del primer partido: la defensa lo primero. Así comenzaron forzando pérdidas y corriendo contragolpes (1-4, minuto 7). Lo que superaba el muro que inicialmente formó Maqueda, Morros y Guardiola, lo paraba Hombrados, protagonista otra vez de un encuentro excepcional.
Pero enfrente no estaba cualquiera. Dinamarca, campeona de Europa, mostró un arsenal de recursos para levantar cualquier partido. Así, eligieron su arma favorita, los misiles de Mikkel Hansen, cuya facilidad para disparar desde los nueve metros volvió a mostrarse única.
También influyó la que podríamos llamar ‘la maldición de los porteros daneses’. En los últimos duelos, principalmente en las semifinales tanto del Mundial como del Europeo, que siempre han caído de lado danés, mucha culpa fue del acierto de su meta, Landin Jacobsen. Ayer sólo jugó unos minutos, pero cedió el protagonismo a Cleverly, que se convirtió en el mejor de Dinamarca.
Todo se decidió en el último minuto, con 23-23 en el marcador. Dos ataques y uno para cada equipo. España apuró y decidió buscar a Aguinagalde en el pivote, pero el balón no llegó a las manos del gigante de Irún. Dinamarca, tras circular mejor el esférico, sí encontró a Knudsen, que dio la victoria a Dinamarca a falta de cuatro segundos y, de paso, confirmar que su selección sigue siendo la gran bestia negra del equipo español.