Blanco salvó a Ecuador de la expulsión de los Juegos

Ecuador ha evitado la suspensión y ha salvado su participación en los Juegos de Londres gracias a la intervención de Alejandro Blanco, el presidente del Comité Olímpico Español (COE), que actuó de mediador en el conflicto que mantenían el Gobierno de Rafael Correa con el Comité Olímpico Internacional (COI). Ayer se firmó el pacto en Guayaquil.

El Gobierno ecuatoriano había destituido a los presidententes de 40 federaciones por incumplir la ley del deporte, que les obligaba a renovar las directivas antes de abril pasado. El responsable del COI, Jacques Rogge, envió una carta a Correa en la que le advertía de "una posibilidad real de suspensión" si no revocaba la medida, dado que el Comite Olímpico no acepta las intromisiones gubernamentales en órganos deportivos.

Además, la asamblea general de la Asociación de Comités Olímpicos Nacionales (ACNO), celebrada en Moscú, aprobó una moción de censura contra las disposiciones tomadas por el país suda­mericano.

Vázquez Raña.

Precisamente en la ACNO, Alejandro Blanco ya intercedió en otro asunto, al lograr convencer al mexicano Mario Vázquez Raña de que renunciara a la presidencia de este organismo para evitar un grave conflicto interno. El nuevo responsable es ahora el jeque kuwaití Ahmad Al-Fahab Al-Sabah. El éxito de aquella intervención provocó que el COI designara también a Blanco como mediador ante Ecuador.

Blanco mantuvo el 29 de abril una primera reunión en Guayaquil con José Francisco Cevallos, ministro de Deportes, y con Danilo Carrera, presidente del Comité Olímpico de Ecuador. Tras este contacto quedaron emplazados el 10 de mayo en la sede del COI, en Lausana, donde también intervino Pere Miró, director de Relaciones con los Comités Olímpicos Nacionales. Allí se llegó a un principio de acuerdo, que se plasmó ayer con la firma del pacto en Guayaquil.

Blanco ha logrado que el Gobierno de Ecuador acceda a aplazar la entrada en vigor de su decisión hasta después de los Juegos Olímpicos 2012.