El Copenhague deja fuera de Europa al Barcelona

El Barcelona Intersport, vigente campeón europeo, ha dicho adiós a la "Final Four" de Colonia a pesar de ganar hoy en el Palau al Copenhague, por 36-33, un triunfo insuficiente para hacer frente a los seis tantos en contra de la ida (29-23).

Los hombres de Xavi Pascual, empujados por un Palau Blaugrana volcado con su equipo, han luchado hasta la extenuación frente a la disciplinada escuadra de Magnus Andersson, que ha respondido a la velocidad barcelonista con la misma moneda.

Los poderosos lanzamientos del veterano lateral zurdo islandés Olafur Stefansson, las penetraciones de su compatriota y extremo izquierdo Valur Sigurdsson y del extremo zurdo sueco Nicklas Ekberg por la derecha, neutralizaban rápidamente las ligeras ventajas azulgranas.

El Barcelona salió lanzado al ataque y la respuesta danesa llegó con una sólida muralla en ''seis-cero'' que no permitiría hasta el ecuador del primer tiempo abrir una ligera brecha a los de Pascual (9-6, m.14), pero un 0-3 visitante dejó las cosas en su lugar en apenas tres minutos (9-9, m.17).

Daniel Sarmiento relevaba a Raúl Entrerríos en el eje del ataque barcelonista (11-10, m.20) y volvía a abrirse la brecha tras un penalti transformado por Rutenka (17-14, m.26), pero la respuesta danesa con un tanto de Ekberg y dos de Stefansson equilibraba el marcador al descanso (17-17).

Los locales habían hecho un mayor derroche físico que sus rivales en la primera mitad y lo acusaron al comienzo del segundo tiempo. Xavi Pascual daba descanso a Daniel Saric y entraba Johan Sjostrand.

El Copenhague aprovechó el momento para ponerse por delante. El segundo tanto de Mikkel Hansen dejaba el marcador en 18-20 para el conjunto danés y los intercambios de goles iban favoreciendo a los visitantes (25-27, m.44).

Saric había vuelto bajo los palos en el minuto 40 (23-24) y empezaba a mostrarse muy efectivo. Esto espoleó a sus compañeros y, con un Palau entregado, daban la vuelta al marcador con un parcial de 5-0 (30-27, m.52) merced a la efectividad de Rutenka y Sorhaindo.

El técnico visitante Magnus Andersson pidió tiempo, pero Juanin, gris hasta entonces, ampliaba la ventaja azulgrana (31-27, m.52).

La esperanza volvía a un Palau Blaugrana que no cesó de animar a sus jugadores. Faltaban tres goles para el milagro y quedaban ocho minutos.

Ahí surgió la veteranía de Stefansson y Sigurdsson, que se cargaron a su equipo a la espalda y, a cada gol azulgrana, con un Rutenka lanzado, el Copenhague respondía con otro y no permitió que se culminase la remontada (36-33).