¿Poker online o poker en vivo?
Es, desde siempre, una de las grandes preguntas que se hacen tanto aficionados como profesionales del poker.
¿El tapete verde? ¿El sonido de las fichas de cerámica yendo de mano en mano? ¿El tacto de las cartas de plástico? ¿La emoción de hacer un farol y que tu rival te mire a los ojos buscando información?
O, por contra, ¿la comodidad de casa? ¿Estar sentado tranquilamente mientras juegas, escuchando música? ¿Jugar cientos de manos a la hora en varias mesas a la vez? ¿Encontrar una oferta de torneos para todos los bolsillos y de todas las modalidades?
Éste es uno de los grandes dilemas que todos los jugadores de poker se plantean. ¿A qué dedicar mi tiempo? ¿Es más rentable jugar a poker en vivo donde se puede identificar más deprisa a los jugadores novatos o quizá vale la pena poder jugar muchas más manos y mesas a la vez?
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Muchos de los jugadores más famosos coinciden en que ambos terrenos tienen características muy diferentes. Mientras que el poker online tiene una parte mucho más matemática y basada en programas de análisis de estadísticas, el poker en vivo requiere una serie de habilidades perceptivas diferentes.
¿Cuál es tu modalidad favorita? ¿El poker online o el poker en vivo?