Poker | Internacional
Estados Unidos bloquea las salas de poker online
Las autoridades provocan el cierre de las tres salas más importantes que operaban en el país.
El pasado viernes 15 de abril, la Fiscalía del Distrito Sur de Nueva York confiscó los dominios de las tres salas de poker más grandes del mundo, PokerStars, Full Tilt Poker y Absolute Poker, en una acción en la que además incrimina a sus principales propietarios en delitos de blanqueo de capitales y juego ilegal.
El 30 de septiembre de 2006, el Congreso de Estados Unidos, controlado en ese momento por el Partido Republicano, aprobaba la SAFE Port Act (Security and Accountability For Every Port Act) una ley sobre la seguridad en los puertos del país que, a última hora y en su título VIII incluía la UIGEA (Unlawful Internet Gambling Enforcement Act) o Ley de Ilegalidad de las Apuestas en Internet. El 13 de octubre, el presidente George W. Bush ratificaba con su firma la ley, que entraba automáticamente en vigor prohibiendo a los ciudadanos la participación en juegos de apuestas a través de Internet.
A los pocos días de la aprobación de la UIGEA, PartyPoker cerraba el acceso a los jugadores de Estados Unidos. Hay que tener en cuenta para entender el calado de la decisión que, en ese momento, Party Poker era la sala número del mundo por volumen de jugadores.
Tras PartyGaming, fueron otras empresas como bwin o Cassava Entreprises (Pacific/888poker) las que decidían abandonar el mercado USA, mientras que PokerStars, Full Tilt Poker, Absolute Poker, UltimateBet o Bodog decidían no cerrar sus servicios a sus clientes de Estados Unidos interpretando que, según la ley, ellos no cometían ningún delito. Esta decisión provocó un "nuevo orden mundial" en el sector y aupó a PokerStars y Full Tilt al liderazgo internacional del poker online.
Tras esta actuación de las autoridades estadounidenses, en este momento no es posible para los jugadores del país acceder a ninguna sala de poker online.
Sin embargo, el asunto de la legalización del juego en Internet y la regulación del sector se prevé próxima en Estados Unidos. Ahora falta saber si estas empresas que, supuestamente, han incumplido la ley podrán obtener una licencia para operar en el mercado.
Posiblemente, las grandes beneficiadas de esta operación pueden ser las empresas que eligieron en su momento cerrar sus operaciones en el país a la espera de que el mercado se regularizase.