Un ensayo de Enríquez le da el título a los Gatos

Un ensayo agónico de Enríquez en la última jugada del partido subió el empate al marcador y le dio el triunfo a los Gatos por el número de ensayos (dos a uno) en la final de la primera edición de la Superibérica.

Los Mariners desplegaron desde inicio un juego inteligente, empujados por su entrenador, Bryce Bevin, un perro viejo del rugby. Con un equilibrado juego de delantera basado en su espectacular tercera (Aceña, Craig y Cook) y la clarividente dirección de juego de Ceretto y Quirelli, los del Levante enjugaron rápidamente el ensayo inicial de Tudela con las patadas certeras de Agustín Gómez, uno de los descubrimientos de la competición. Los Gatos jugaban incómodos, con una delantera que se veía superada y sufriendo porque no tenía la posesión de la pelota. El marcador se manejaba en el alambre, con tres puntos de renta para unos y otros. Hasta que una carga con superioridad mariners en el lado cerrado acabó en el lado opuesto posada por el joven Javier Carrión. Los de la Comunidad Valenciana, que ya habían ganado los dos partidos precedentes a los madrileños, mostraban confianza en su juego agresivo. El partido comenzaba a teñirse de azul. Entonces entró Pablo Feijoo y el juego local ganó en velocidad y se sacudieron el dominio de los de Bevin.

Mariners se jugaba el órdago a la pierna de Gómez, Gatos al talento de sus tres cuartos. Y así, con los minutos goteando lentamente, el marcador alternaba el liderato. Hasta que se llegó al final de la carretera. Un balón profundo en el eje tras una carga de Bernasconi acabó en las manos de Pablo Enríquez, que se tiró a tumba abierta en busca de la zona de marca levantina. Ensayo y triunfo (por empate) de los madrileños que logran la triple corona al sumar los títulos de Copa y Liga logrados por el CRC.

La Superibérica cierra así su primer capítulo. Protagonizada por jugadores como Le Roux, Sempere, Alcón o Bueno, la competición ha sido, sobre todo, un elemento aglutinador para todos los clubes españoles: 54 han participado. Esa es, sin duda, la mejor de las noticias. La SIR se va de vacaciones hasta marzo del año que viene.