La Audiencia reabre la Operación Puerto

El Tribunal de la Audiencia Provincial de Madrid, presidido por Arturo Beltrán, ha decidido reabrir la Operación Puerto casi un año después de que Antonio Serrano, titular del Juzgado número 1 de Madrid, decidiera su sobreseimento y archivo (8 de marzo de 2007). El fallo aún no es oficial, pero Eugenio Bermúdez, secretario general de la Federación Española de Ciclismo (FEC), confirmó a AS que habían tenido "constancia verbal" de la reapertura del caso.

"Pero sin la resolución oficial no podemos saber hasta qué punto se ha accedido a las peticiones que hacíamos, si al todo o a una parte", dijo Bermúdez quien no obstante se mostraba satisfecho. "El Tribunal nos ha dado la razón sobre que se podían hacer más investigaciones y profundizar más en otras ya iniciadas. Pero hay que saber hasta dónde nos da la razón". Al respecto, ayer circulaba un rumor de que únicamente se iban a reabrir los expedientes de Eufemiano Fuentes y Merino Batres, pero puede ser un rumor interesado.

Vuelve al mismo juez.

Lo que sí está claro es que el proceso volverá al Juzgado número 31, del que sigue siendo titular Antonio Serrano. Será él quien continúe con la instrucción, practique las diligencias que le pida el Tribunal y, si lo cree oportuno, las nuevas que le soliciten la fiscalía o la defensa.

No será antes de seis meses cuando el juez resuelva entre dos posibilidades: nuevo archivo del caso, si considera que tampoco las nuevas investigaciones aportan datos de importancia, o bien al contrario, apertura de un nuevo juicio oral.

En este segundo caso es complicado pronosticar cuánto va a durar el caso, pero pueden dar por seguro que vamos a tener Operación Puerto al menos por un año más.

El juicio se arbitraría siempre conforme a las leyes que existían en el momento de los hechos (23 de mayo de 2006), que preveían delitos contra la salud pública, y no con la nueva Ley Antidopaje en la que se preven sanciones más duras para estos casos.

Los ciclistas.

En la antigua ley no se contemplan penas para los ciclistas, a no ser que se demuestre que han contribuido al tráfico de sustancias, pero no por haberse dopado.

Otra cosa es que se les abran expedientes deportivos y sean sancionados. Precisamente este es uno de los puntos que había pedido la Federación al Tribunal de la Audiencia, poder utilizar los datos del sumario para juzgar a los ciclistas, algo que el juez les denegó y que ha provocado que todos los corredores que fueron identificados por la Guardia Civil como clientes de Eufemiano sigan sin poder fichar por equipos ProTour o incluso retirados, sin llegar a estar sancionados, ni siquiera expedientados.

Había numerosos motivos para que se reabriera la Operación Puerto. El juez decidió no interrogar a todos los ciclistas, pues consideró que el que hubiera sufrido daños por el dopaje se habría presentado voluntariamente. Sí lo hizo para denunciar precisamente esto Jesús Manzano, pero el juez no le tomó declaración, porque sus denuncias pertenecían a otro caso que ya había sido sobreseído.

Tampoco autorizó el juez al volcado de la información de los teléfonos móviles intervenidos y no dejó a los investigadores a acceder a los datos de los ordenadores, cosa que se hizo bajo su estricto control.

Otra diligencia que no vio necesaria fue el análisis de los medicamentos incautados, cuando la Guardia Civil encontró incluso fármacos falsificados, de la misma fabrica clandestina desmantelada por la Operación Mamut.

No se analizaron las 99 bolsas de sangre, sólo ocho, las que más probabilidades tenían de contener EPO exógena, como así se comprobó.

O dio por bueno que eran para curar el asma de Eufemiano las cajas de Synachten que le hallaron a Manolo Saiz y que la Policía alemana demostró que eran de un desvío ilícito.