Francia va a Cardiff como 'visitante' en su Mundial

Francia pugnó con Inglaterra por organizar el Mundial de rugby 2007. Consiguió el apoyo de Gales y Escocia para su candidatura a cambio de la disputa de partidos en Edimburgo y Cardiff. Dos de Escocia en su feudo y tres de la primera fase y un cuarto de final en Gales. Pero no un cuarto cualquiera, el de Nueva Zelanda ante el segundo del grupo D. Irlanda o Argentina pensaron los galos.

Pero su tropiezo ante los Pumas les ha condenado a medirse a los All Blacks. Y lo que es peor, a hacerlo en Cardiff, donde además se sentirán como visitantes y no sólo por estar fuera de su país. Resulta que la mayoría de las entradas para ese partido fueron adquiridas hace meses por los previsores aficionados All Blacks.

Esto no ha sentado nada bien al seleccionador galo Bernard Laporte, próximo ministro de Deportes francés. Laporte ha comenzado a calentar el choque ante Nueva Zelanda. Lo ha hecho convirtiendo la elección de las camisetas en una trifulca. El francés ha cambiado el azul blue de la bandera francesa por un azul marino en la camiseta de la selección, lo que impide que los All Blacks jueguen de negro por la similitud de tonalidades. Nueva Zelanda ha insistido que Francia es anfitriona del Mundial y por deferencia debería dejar a los kiwis lucir su camiseta habitual y vestir ellos su segunda, la blanca. Pero Laporte ha dicho que nones, que se pongan la plateada que Francia vestirá de azul marino. Habemus lío.

Por otra parte, ya se conocen los equipos para el partido del sábado. Henry ha inyectado dinamita en su línea con Muliaina de centro, mientras Laporte quiere pasar a la historia por su enésimo 'ataque de entrenador'. Si ante Argentina arruinó la carrera de Heymans al situarlo de zaguero, ahora se ha propuesto enterrar a Traille, que se estrenará en esa posición ante Nueva Zelanda. Se acuerdan del día en que Clemente puso a Molina de extremo izquierda en Noruega...

El rugby gana el pulso al Boca-Riveren Argentina

La AFA ha tenido la iniciativa de adelantar el clásico Boca-River, que se jugará el domingo, para que no coincida con el Argentina-Escocia de cuartos de final. Esta maniobra, que sienta un precedente, ha sido bien recibida por el técnico de los Pumas, Marcelo Loffreda: "Fútbol y rugby pueden convivir porque son hermanos". Por otra parte, Felipe Contepomi, centro titular de Argentina, no se ejercitó en el día de ayer debido a la fiebre que padece.

Jonny tendrá a Robinson a su lado ante los australianos

Inglaterra no es la que era, pero va cogiendo color. El regreso de Jonny Wilkinson ha devuelto la sonrisa a sus seguidores. Y ayer, que se confirmó el XV que jugará el sábado ante Australia, recibieron otra buena noticia. Jason Robinson, que sufrió una lesión muscular ante Suráfrica, se ha recuperado a tiempo para estar en el encuentro ante Australia. Junto a ellos estará otro campeón del mundo, el pilier Phil Vickery, que regresa al quince tras una suspensión de dos partidos y un banquillazo del seleccionador inglés Brian Ashton. Australia sólo cuenta con la destacada ausencia de su apertura, Stephen Larkham.